Soraya Weir de Carrera: “He visto cómo se han levantado matrimonios difíciles”

Cuando Soraya Weir habla, lo hace con una soltura que envuelve fácilmente. Tiene mucho para contar. Nacida en Guayaquil y de ascendencia inglesa, esta orientadora familiar dice ser de la generación baby boomers. Sin embargo, cuando se da un vistazo a su perfil de Instagram, nos demuestra que es una mujer que va a la vanguardia de las tecnologías.

A través de sus videos comparte información en torno al matrimonio y la familia, los cuales sostiene que aumentaron sus visualizaciones en estos tiempos de pandemia.

Su estudio donde graba está a unos pocos metros desde donde inicia el diálogo con SEMANA. Nos ha recibido en su casa. La distribución de plantas en el jardín así como las obras de arte que cuelgan en los diferentes espacios son imposibles dejar de mirar. Al preguntarle si la decoración estuvo a cargo de ella, “¡Por supuesto que sí! Y yo misma pinté todos los cuadros”, responde.

Soraya es un cúmulo de experiencias al que nos va adentrando en esta cálida entrevista.

Entre las artes y el deporte

Su matrimonio es fuerte como los amores de antes. Lleva casada 37 años con Andrés Carrera, con quien tiene tres hijos, y nietas por partida doble. “Mis dos hijas quedaron embarazadas casi al mismo tiempo. Así que ahora he vuelto a ver pañales”, sostiene.

De ahí que su estudio de vez en cuando se vuelve cunero -o también perrero- sobre todo cuando la visita una de sus hijas, Daniela, la reconocida entrenadora de canes que vive en Estados Unidos.

Entre sus otras facetas cuenta que es una apasionada por la estética, de ahí que tiene un título de decoradora de interiores.

“La decoración la ejercí durante los cinco primeros años de casada. Aún no era mamá, fue al sexto año que quedé embarazada y es ahí cuando decido darle a la maternidad mi tiempo completo”, recuerda, y agrega que dos años después queda nuevamente encinta y en esa etapa decide retomar la pintura, una pasión que le viene desde la adolescencia y la mantiene hasta ahora.

“Entre mis hobbies hice muchos cuadros figurativos, los vendía, pero nunca hice exposición”.

Desde entonces esta decoradora decidió mirar otros rumbos y los planos para clientes quedaron a un lado. Con el camino vino el tercer hijo y la pintura se mantuvo. “Fue así por veinte años seguidos. Ahora lo retomo de vez en cuando. Por lo general pinto a la mujer y a la naturaleza”.

El deporte también ha estado en su día a día. Antes era el básquet y ahora es el beach tennis, para el cual, su esposo es el compañero de partidas.

De decorar a construir hogares

Un año antes de que nazca su primera hija, con su esposo decidieron prepararse como orientadores familiares. “Los cinco primeros años de matrimonio es la etapa en que las parejas se están ajustando y eso nos ayudó a que todo sea más llevadero”.

Pero no fue hasta cuando sus hijos ya estaban entrando en la adolescencia que Soraya y Andrés empiezan a ejercer como orientadores. Es así como se reinventa: de decoradora ahora pasaba a ayudar a “construir” hogares. Juntos empiezan a dar seminarios, talleres o retiros.

Con tan solo escucharla se aprecia que tiene un don para tratar con las personas. Es serena y también empática.

Confiesa que pararse enfrente de miles no fue fácil. Previamente tuvo que trabajar a nivel personal y ahí ayudó mucho su capacitación como orientadora familiar. “Crecí en una familia pequeña. Éramos mi madre y mi hermano. Mis padres se divorciaron. Y lo que menos quería era que los patrones se repitan. Hoy puedo decir que todo matrimonio llega a ser fuerte cuando se lo trabaja y hay compromiso de ambas partes”.

Ya son más de veinte años en dar ese servicio y ahora está incursionando desde el Instagram donde ya no hay fronteras. Entre anécdotas tienen muchas. “Una vez estábamos aterrizando a Panamá y desde el avión se nos acerca una pareja que nos reconoció para decirnos: “Ustedes salvaron nuestro matrimonio; estábamos a punto de divorciarnos y la charla que ustedes dieron tocó nuestro corazón”, recuerda con satisfacción.

Para ella nunca es tarde para volver a empezar. “He visto cómo se han levantado los matrimonios más difíciles; de cenizas han hecho mansiones. Sí se puede”, afirma, aunque hay excepciones y recomienda soltar cuando hay violencia e infidelidades constantes.

“La decoración, la pintura y el deporte han sido importantes en mi vida, pero lo mío es el servicio, mi objetivo es ayudar a formar familias sólidas”, concluye.

5 tips para parejas

• "Se acabó la luna de miel ¿Se puede restaurar el amor? ¿Por qué se rompen tantas relaciones?” Para Soraya, la solución tiene que ver con la comunicación, aunque da más tips para ayudar a restaurar el amor.
• Compartan tiempo juntos. Acuérdense de la época de cuando eran novios y vuelvan a hacer actividades juntos. Conózcanse de nuevo, y descubran qué les interesa ahora porque el tiempo cambia a las personas.
• Acéptense mutuamente. Lo que no se puede cambiar del otro, acéptelo y más bien enfóquese en las virtudes.
• Sepan manejar las diferencias. Es tan importante llegar a acuerdos aunque el conflicto sea mínimo.
• Restauren el romanticismo. Prendan la llama que capaz se ha apagado con la vida cotidiana. Vayan a su restaurante preferido, viajen, vean películas; rían juntos.
• Comuníquense. Compartan sus experiencias diarias o recuerdos de momentos familiares preferidos para que fortalezcan su intimidad.

Personal

• Guayaquileña, casada con Andrés Carrera, con quien tiene tres hijos y dos nietas.
• Tiene un diplomado como orientadora familiar. Asimismo, es máster en Teología y decoradora de interiores.
• Entre sus pasatiempos están la pintura y el deporte.
• En su cuenta de Instagram (@familiaenconstruccion) da tips para parejas.