Acariciar perros reduce el estrés y mejora tu estado emocional, según la psicología.
Acariciar perros reduce el estrés y mejora tu estado emocional, según la psicología.CANVA

¿Siempre acaricias a los perros que ves? Esto revela la psicología de tu personalidad

¿Eres de los que acarician a todos los perros que ven? La psicología explica qué significa y qué dice sobre tu personalidad

¿Eres de los que se detienen a acariciar a cada perro que se cruza en el camino? ¿Te brillan los ojos cuando ves a uno jugando sin parar? Tranquilo, no estás solo. Y según la psicología, ese impulso tiene mucho que ver con cómo eres como persona.

Un estudio realizado por expertos de tres universidades de Estados Unidos encontró que quienes aman estar cerca de los perros (en especial acariciarlos) no solo disfrutan de su compañía, sino que también comparten rasgos de personalidad únicos. Además, el simple acto de tocarlos puede generar beneficios reales para la salud mental.

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¿Por qué acariciar perros nos hace sentir tan bien?

Los investigadores de las universidades de Florida, Carroll y Marquette descubrieron que el contacto con perros activa respuestas físicas y emocionales positivas.

“Su compañía ayuda a regular la presión arterial y la frecuencia cardíaca, promoviendo un estado mental más relajado para el humano”, explicaron.

Y no es solo por el cariño: tener un perro cerca, acariciarlo o convivir con él puede ayudarte a sentirte mejor contigo mismo. Según los psicólogos, los niveles de cortisol (la hormona del estrés) bajan, mientras que se eleva la sensación de calma.

“La convivencia con un perro tiene un impacto directo en la reducción del estrés. Al interactuar con ellos, los niveles de cortisol disminuyen, mientras que se promueve una sensación de calma y relajación”, señalaron.

Tocar o convivir con un perro puede ayudarte a bajar el cortisol, la hormona del estrés.
Tocar o convivir con un perro puede ayudarte a bajar el cortisol, la hormona del estrés.CANVA

Tener perros o amarlos: ¿cómo influye eso en tu personalidad?

Según el mismo estudio, quienes tienen una conexión fuerte con los perros (ya sea como dueños o simplemente como amantes de estos animales) tienden a compartir algunos rasgos en común:

  • Eres más paciente y tolerante

Cuidar de un perro implica constancia, disciplina y mucho amor. Esa experiencia moldea a las personas en su forma de relacionarse, no solo con animales, sino con su entorno social.

  • Tu sensibilidad está más desarrollada

Las personas que acarician perros con frecuencia suelen ser más afectuosas, empáticas y abiertas emocionalmente. Tienen más facilidad para conectar con los demás.

  • Disfrutas del aire libre

Los paseos, las caminatas y las actividades con perros hacen que estas personas lleven un estilo de vida más activo y natural. Caminar, correr o simplemente pasar tiempo en el parque es parte de su rutina feliz.

Más que compañía, una ayuda para tu rutina y bienestar

El estudio también encontró que convivir con un perro puede ser una herramienta emocional poderosa para quienes enfrentan ansiedad, depresión o falta de motivación.

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“Puede imponerle una estructura y rutina diaria a personas que enfrentan problemas emocionales o de motivación”, explicaron los expertos.

Ese compromiso diario (alimentarlo, sacarlo, cuidarlo) da orden y propósito a muchas personas.

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