De padre suizo-alemán y madre ecuatoriana, recorrió el mundo al cumplir los 18 años. El periplo, que duró una década, lo vivió en Argentina, Francia, Suiza, Alemania, China, Dubái, Catar y Mónaco, en los que aprendió varios idiomas y culturas mientras estudiaba y trabajaba. “Viajar solos nos hace salir de nuestra zona de confort y aprender a comunicarnos en diferentes formas. Para mis padres, fue duro que me vaya, pero me apoyaron”. En Montreux, Suiza, estudió Hotelería y en Dubái siguió Comunicación de Moda. Sin duda, un apasionante recorrido de observación y aprendizaje que forjó en la joven un espíritu fuerte y decidido.

A su regreso a Ecuador decidió impulsar un nicho que ansiaba ser ocupado por mujeres ávidas de compartir el gusto por la moda y con curiosidad por todo lo que este campo abarca. A la par, una gran cantidad de diseñadores ansiaban coberturas mediáticas para dar a conocer sus productos. “Así nació mi blog, Front Row, con la idea de impulsar la moda local mediante post interactivos, comentarios y redes sociales. Dediqué mucho tiempo a buscar información sobre la moda nacional y encontré muy pocas plataformas que se dedicaran exclusivamente a ese mundo. Armé las piezas del rompecabezas y me di cuenta de que había otros que buscaban lo mismo. Entonces decidí compartir mi pasión por la moda, información recopilada y opiniones a través de esta plataforma accesible”.

En ese contexto, Cristina considera que aún en la sociedad ecuatoriana existe miedo a expresarse de manera diferente y, quizás, a encontrarse a uno mismo. “Muchos copian a otras personas o estilos ajenos por miedo a cometer errores y pocos se atreven a ser auténticos. Me gusta inspirar a otras chicas a que no teman romper las reglas”.

Trayectoria sobresaliente

Fiel a sí misma, la bloguera ha ido cumpliendo metas promoviendo el mercado de la moda local, con el firme propósito de posesionar marcas y a diseñadores emergentes. Su manera frontal y asertiva de comunicar ideas, conceptos y tendencias la ha llevado al lugar privilegiado en el que se mueve con total control y conocimiento de causa. Su plataforma social, de grandes alcances, visibiliza a nivel regional, más que un nombre, a un país: Ecuador.

Cristina fue la primera bloguera ecuatoriana invitada a los Fashion Weeks más importantes (Nueva York, París, Milán) y ha estado en la primera fila de desfiles de nombres como Carolina Herrera, Moschino, Escada, Manish Arora, Jeremy Scott y Naeem Khan, lo que le ha dado la oportunidad de conocer a personalidades de la talla de Ana Wintour, Chiara Ferragni, Nikki Hilton, Carolina Herrera y otros. Además, ha sido invitada a participar en más de cien medios locales e internacionales en los últimos años, como E! Entertainment Television y Buzzfeed (Nueva York), Nylon, La Telé (Suiza) y más.

La violinista (toca desde hace más de 20 años) dice que su trayectoria ha sido enriquecedora y diversa, al evolucionar y crecer con una inmensa comunidad que la sigue con atención, mientras apuesta con éxito en otros campos con una productora y agencia de marketing digital, en la que desarrolla capacitaciones y coaching. Además, está envuelta en proyectos urbanísticos que buscan sostenibilidad y balance en todos los sentidos; e incursiona en la agricultura, en una finca en el valle del Chocó que adquirió con su flamante esposo, el reconocido pintor y muralista Apitatán.

¡Recién casada!

En 2019, el destino se confabuló al juntar a la famosa bloguera con el artista que cambió la percepción del arte callejero con sus potentes obras en el escenario de TEDx Quito. Ambos fueron invitados a compartir sus experiencias y desde entonces no se separaron más. Su casamiento fue en el solsticio de verano en Mashpilodge -en Nanegalito-, en una inolvidable ceremonia llevada a cabo por Manari Ushigua, líder espiritual y chamán, reconocido en las esferas de Hollywood (parte de su trayectoria está en Instagram). “¡Fue mágico! Invitamos a nuestro más cercano círculo para compartir nuestra unión en un fin de semana muy especial. ¡No pudimos estar más felices!”.

Embajadora de marcas

La voz y propuesta de la bloguera fue considerada entre las más potentes en el 2016 y 2017 por Blogguer Influencer Week Latam. Su fuerza radica en la honestidad, fluidez y experiencia con la que transmite sus mensajes, por los que ha sido embajadora de grandes marcas como Nine West, Salvatore Ferragamo, Maseratti, Miami Fashion Week, Tiffany & Co., L’Occitane y la revista Nylon Español. “Viajar a Japón como embajadora de Maserati fue uno de mis logros favoritos, así como sacar el ‘Beauty Box de L’Occitane”.

Cara a Cara

• ¿Cómo ha logrado el impacto en tu campo?

Sacrificando horas de sueño, ignorando a los haters, siendo fiel a mí misma y con mucha empatía de lado a lado, respetando a mi comunidad.

• Hace muchas cosas a la vez. ¿Cómo le alcanza el tiempo?

Con un excelente equipo y aplicando RPM (Rapid Planning Method) que me ayuda a enfocarme y el enfoque te da poder. Cualquier persona que sea exitosa en una o varias áreas de su vida consistentemente, no es que tiene suerte ¡está enfocada!

• ¿Cómo es el clóset de una figura como usted?

Es como una galería. Es un espacio que evidencia un coleccionismo de piezas que he ido encontrando en mis viajes por todo el mundo. Ahí están mis memorias y mi historia de vida.

• ¿Cuál fue el diseñador de su vestido de novia?

Movimos la fecha para coincidir con el solsticio de verano y no alcancé a hacerlo aquí. Mi vestido es de un diseñador japonés que me encanta, Tadachi Soji.

• ¿Cómo se cuida por dentro y por fuera?

Procuro cultivar mi alma, mi corazón, mi cuerpo. Creo que todo tiene que tener un balance y no tengo extremos en ningún aspecto.

• ¿Cómo proyecta su futuro?

Con independencia económica y todo el tiempo para estar con la gente que quiero.

• ¿Su próximo viaje dónde será?

Será por el Medio Oriente o la Riviera Maya ¡o ambos! Eso está por verse.