El presidente de Bolivia, Evo Morales, no puede negar el nacimiento de su hijo, espetó su expareja Gabriela Zapata en declaraciones al diario El Deber, refutando la versión oficial de que el infante no existe.

“No puede negar la existencia del niño porque hasta 2010 le enviaba $ 100 de pensión a su hijo y ese dinero no alcanzaba para su manutención”, afirmó Zapata, desde el penal donde está recluida desde hace un mes.

Zapata, exgerente de la empresa china CAMC, con millonarios contratos en Bolivia, concedió la entrevista al matutino el mismo día que envió una carta a la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (Acnudh), en La Paz, implorándole su intervención en su caso.

El Deber le consultó a Zapata cuáles son las pruebas de su versión, a lo que ella respondió que tiene todos los documentos guardados y una escritura pública “por si le sucede algo”.

En la misiva al Acnudh, divulgada por la agencia católica de noticias Fides, la mujer denunció que teme por su vida, pues es amenazada, y reprochó que se ponga en duda la existencia del infante. Ella -con dos hijos de relaciones anteriores- aseguró en la misiva que “el señor presidente ha ordenado que el tema tenga carácter de reservado, por tanto estoy impedida de demostrar y hacer conocer la verdad”.

Inicialmente, Morales reconoció que había tenido un hijo con Zapata pero dijo que falleció al poco de nacer; mas esta semana, el vicepresidente Álvaro García y el fiscal general, Ramiro Guerrero, sostuvieron que nunca existió, y que ella fraguó certificados de nacimiento y de maternidad. AFP