Un cambio en el color de cabello refresca y rejuvenece la apariencia. Por eso, al optar por tinturarlo, es recomendable acudir donde un especialista capilar, quien lo guiará a tomar la mejor decisión.

Orgánicos y coloridos

El uso de tintes con ingredientes más naturales u orgánicos, más que una tendencia, es el nuevo objetivo en el área capilar. Así lo manifiesta el estilista profesional Roberto Maidana, al comentar que poco a poco todas las líneas capilares comienzan a incluir dentro de sus componentes ingredientes naturales, dejando atrás los temidos químicos como el amoníaco, parabenos y amonios (considerados posibles causantes de cáncer). ¿Pero cómo saber que un tinte es totalmente orgánico? Carolina Aguirre, estilista y colorista especializada en la academia Nature Lab en Panamá, explica que este puede ser reconocido al tener el certificado internacional Ecocert y al generar el 100 % de su coloración con productos vegetales “provenientes por ejemplo de varias flores, frutas, jazmín, tallo de hojas de guaba y vegetales como la zanahoria”.

Atención previa

Los tintes orgánicos, al ser libres de químicos nocivos para la salud, pueden ser utilizados durante el embarazo y la lactancia.

Sin embargo, para comprobar si no sufre de alergia, coloque una pequeña cantidad del producto en la piel y si después de 48 horas observa hinchazón, cambio de color o comezón en la zona, es aconsejable acudir al médico especialista para una mejor evaluación.

Color ideal

-La técnica de tinturado favorita es el balayage (o degradado del color desde la raíz hasta las puntas), según Maidana.

-A las pieles blancas les favorecen los tonos rubios y beige claro; a las trigueñas, marrones y miel; y a las pieles negras, los cafés.

Cuidados posteriores

-Para el lavado del cabello utilice un champú de línea diaria que prolongue el color, más el de limpieza profunda (los cabellos secos, utilizarlo una vez cada 15 días y los grasos, una vez al mes).

-Lea las etiquetas de los productos y compruebe que sean libres de amonio o parabeno. Y evite la sobreexposición a los químicos de las piscinas y al agua de mar.