El jueves al mediodía casi un centenar de hombres y mujeres entre 22 y 44 años esperaba inquieto para sentarse frente a tres empresarios españoles que llegaron al Ecuador buscando 250 trabajadores agrícolas.

La búsqueda es parte del plan piloto de Migración Circular que impulsa España, a través de Migraciones de la Secretaría de Estado del Ministerio de Inclusión de ese país con el Gobierno a través del Ministerio de Agricultura.

Ellos iban en su tercer día de mirar a los ojos a cientos de interesados en las plazas de trabajo en Huelva, España.

Los nombres de los escogidos se conocerán la próxima semana. Deberán viajar en diciembre y permanecer seis meses en fincas de esa localidad española. Su tarea será recoger frutos rojos de la estación como fresas, arándanos, moras y otros, durante seis horas y media al día, seis días a la semana.

Recibirán 49 dólares diarios, seguro social, alojamiento, el pasaje de avión de ida, pago de luz y agua potable.

Soledad Andrango, una integrante de una comunidad indígena de Imbabura, entendió claramente la explicación que dieron los tres empresarios en el auditorio del Iniap, en el sur de Quito. Al sitio llegaron decenas de interesados en aplicar a las plazas de trabajo. Eran parte de los 1.500 preseleccionados por el Ministerio de Agricultura que debían entrevistar los empleadores.

Andrango se mostró optimista. Dijo que el “objetivo que buscan ellos es que sepamos de la agricultura, necesitamos trabajar, es un buen proyecto que el Gobierno dé la oportunidad con empresas extranjeras”.

Y ella ha trabajado en agricultura muchos de sus 38 años en siembra y cosecha de papas, habas, chochos, arveja, trigo, cebada y en rosas cultivadas en invernaderos. Ya se mira en España, ya quiere conocer e intercambiar conocimientos.

Más de 30.000 ecuatorianos de provincias como Azuay, Chimborazo, Cotopaxi, Imbabura y Pichincha se inscribieron. Desde Migraciones de la Secretaría de Estado del Ministerio de Inclusión español han desarrollado el plan Piloto de ‘Migración Circular’ con el Gobierno para la selección de trabajadores que irán a trabajar en agricultura.

El Gobierno de España actúa como coordinador del programa facilitando la oportuna documentación en colaboración con otros departamentos ministeriales. Visa de estancia y de trabajo (visado temporero) recibirá el seleccionado. Pero hay obligaciones. El retorno es un compromiso del trabajador y debe comprometerse a regresar. Si cumple, será beneficiado en campañas posteriores, señala el empresario de Movilidad y Políticas Migratorias, y secretario general de UPA Huelva, Manuel Piedra. Los tres empresarios han estado cinco días en ciudades como Azogues, Riobamba y Quito.

Menciona que los requisitos son que el trabajador sea mayor de 21 años y menor de 45 años, con experiencia agrícola y con ganas de emprendimiento y salir del país. Pertenecen a una asociación de pequeños agricultores que están demandando mano de obra en Ecuador. Hay más de 5.000 agricultores que necesitan mano de obra, señala.

Las organizaciones ya tienen experiencias similares con países como Polonia, Rumanía, Bulgaria y con Marruecos. “Sabemos que vuestros trabajadores son personas responsables y trabajadoras, que necesitan este sustento para mantener a su familia y queremos colaborar y participar dando lo que tenemos que son puestos de trabajo”, indicó.

Si el plan piloto funciona el próximo año el trabajador recibirá directamente el contrato con el mismo empleador y en las mismas condiciones. Caso contrario se cerraría la posibilidad de migrar de forma segura para decenas de ecuatorianos.

Advirtió que si incumplen entrarían en situación irregular y a expensas de las mafias que explotan y pagan menos.

Acuerdos

La oferta busca ser ampliada

El viceministro de Movilidad Humana, Luis Vayas, anunció que este no es el único acuerdo de este tipo firmado con otros países.

Según el funcionario, ya hay un acuerdo para trabajo y estudio con Francia. Algo similar se viene trabajando con Australia, Canadá y otros países de la Unión Europea.

Estados Unidos ofreció becas estudiantiles, especialmente para jóvenes provenientes del austro ecuatoriano.

“Hemos pedido a las autoridades estadounidenses que las becas se enfoquen a mujeres del austro. Porque la situación de las mujeres, niñas y niños es muy fuerte y tenemos que trabajar en ese ámbito”, señaló Vayas.