A Luis González no le importó que el asfalto de la vía La Libertad - Santa Elena esté caliente por el intenso sol de la mañana de ayer, el hombre de 48 años caminó descalzo en el recorrido de fe que por el Viernes Santo se cumplió en la jurisdicción peninsular.

"Estoy pidiendo un milagro, es por la salud de mi familia. Tengo fe que Dios escuchará mis ruegos y el pedido me será concedido", dijo con optimismo González mientras oraba en el recorrido.

Fueron 12 kilómetros de caminata que los creyentes cumplieron, en el periplo se presentó el cuadro vivo de la pasión de Cristo en dónde participaron jóvenes catequistas de las iglesias del cantón La Libertad. Los azotes que recibía Jesús por parte de los soldados romanos llenaban de tristeza a los feligreses.

Un momento muy doloroso fue la colocación de la corona de espinas, "Padre santo cómo habría sufrido Jesús si en esta simulación se puede ver el sufrimiento del chico que hace de Jesús, no quiero ni imaginar en la época real", decía Blanca Sánchez, una de las presentes.

Las oraciones de la mayoría de los participantes fue para que Dios proteja a la Península de la inseguridad que actualmente vive el sector. Así también pidieron para que disminuya la furia de la naturaleza debido a las lluvias presentadas en los últimos días.

La peregrinación culminó en la ciudad de Santa Elena con una misa campal, "este recorrido lo cumplo todos los años. Ya llevo diez años en cada Viernes Santos", aseveró Ruth Neira.