La retirada de los muros divisorios instalados hace más de veinte años en algunas arterias de Guayaquil no será total. La Agencia de Tránsito Municipal (ATM) tiene previsto quitar algunos de ellos, como los de la vía a Daule o la Juan Tanca Marengo, pero conservará otros como los de la avenida de las Américas porque considera que todavía son útiles.

Hace más de dos décadas, la definición de las rutas por las que debían circular los buses interprovinciales e intracantonales motivó la construcción de estas barreras en algunas vías rápidas. En esta última década se efectuó una importante reorganización del tránsito que afectó a esta clase de vehículos, obligados a tomar ahora arterias perimetrales. Pero los muros divisorios de hormigón, de unos veinte centímetros de altura y treinta de anchura, no desaparecieron.

Más que un apoyo para una correcta circulación, se convirtieron en un problema para los conductores, especialmente durante las noches por la escasa visibilidad. Los vehículos corren el riesgo de encunetarse, tomar una ruta no deseada o provocar un accidente al tratar de sortearlos.

El pasado jueves, EXPRESO publicó un reportaje sobre el peligro que representan los implantados en la vía a Daule, especialmente en los kilómetros 10,5, 12,5 y 14,5, donde al menos dos vehículos por semana sufren daños. La Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) anunció que el retiro de las barreras implantadas en esta carretera se efectuará en enero.

Pero la ATM también ha puesto sus ojos en otras vías, como la Juan Tanca Marengo. En esta arteria hay tres sitios conflictivos: a la altura de la ciudadela Martha de Roldós, la avenida Raúl Gómez Lince y Urbanor. El jefe de Planificación de Tránsito, Freddy Granda, indicó que la retirada en esta zona se aplicará en febrero.

Sin embargo, la ATM prevé conservar los instalados en algunos puntos como la avenida de las Américas, desde Isidro Ayora hasta la Hermano Miguel. El motivo: aún los considera útiles para los conductores que giran hacia la derecha, en dirección a La Garzota.

Aunque no era una de las rutas que tomaban los buses, en su día también se construyeron muros en la conexión de la avenida del Bombero y la José Rodríguez Bonín. Estos no solo no se quitarán, sino que se les instalarán unas guardavías metálicas de entre 70 y 90 centímetros de alto. El objetivo es que sirvan de soporte ante eventuales impactos de vehículos e invasiones de carriles.

Cerrarán parterres de dos calles

Además de la vía a Daule, los trabajos programados para enero incluirán el retiro de muros jersey en la calle Portete, específicamente en las intersecciones 14,19, 24 y 35, así como en la 17 y Brasil. Luego se efectuará el cierre de los parterres centrales de ambas vías.

El detalle

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