en las campañas políticas usualmente hay dos banderas: cambio o continuismo. Curiosamente, Obama ha utilizado ambas. Su candidatura del 2008 se resumía en una palabra: “change” y la del 2012 en otra: “forward”, sigamos por este camino. Podemos concluir que su presidencia ha sido exitosa (cosa que se confirmaría el 8 de noviembre) porque Hillary, aun siendo otra candidata, ha continuado por el sendero heredado. Utiliza sus formas (“apolítico”, real, como uno) adaptándolas a su personalidad. Si Obama hizo “show” de la política con su aparición en Ellen DeGeneres, Clinton lo hizo yendo a La Flaca y el Gordo. El discurso es muy parecido también, refuerza el relato de hacer una “mejor América”, más justa, donde las minorías tengan mayor participación, etc. Hillary se encarna como la heredera y guardiana de esta administración. Continuismo. No siempre los candidatos buscan seguir la línea de su antecesor, por ejemplo McCain -considerando lo desgastada que estaba la figura de Bush- prefirió que no participara en su campaña; es más, su argumento principal fue que él no era “otro Bush”. Por eso los estrategas de Lenín la tienen difícil. La 35 es un movimiento que encarna la constante lucha por la revolución y el “cambio de país” de la década ganada. Pero, con la crisis económica, con el desmoronamiento de Venezuela (ideal a seguir), con casos de corrupción que insultan el eslogan -alguna vez dicho, ya olvidado- “manos limpias, corazones ardientes”, ¿podrán mantener el discurso? Que no es un discurso más. Es el discurso que les dio vida; el relato, el mito que los define. ¿Cómo se desvinculará Moreno de Correa? Todo parece indicar que presentarse como “más de Correa” (al estilo Hillary/Obama) lo terminará perjudicando. La pregunta es: ¿por qué relato va a apostar? Probablemente por un punto medio entre cambio y continuismo. Si apuesta mucho por lo primero, sería visto como un traidor o incoherente, e inclinarse por lo otro es suicida. En política, lo que no hay, se inventa. Tal vez Moreno abandere la causa de “la renovación”. Si es así, la pregunta seria es: ¿le será suficiente?

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