Finalmente se anunciaron las reformas económicas que se encontraba desarrollando la función Ejecutiva. Aunque aún es pronto para calificar estas medidas como buenas o malas, se puede decir que buscan darle un impulso al país para que salga del bache económico actual. La eliminación del subsidio al diésel es la medida que tendrá un mayor impacto a nivel económico y social. Con esta liberalización se sincerará el mercado, es decir que aumentarán los precios en bienes y servicios. Pero es un ajuste necesario para equilibrar las finanzas fiscales y se anunciaron medidas compensatorias para las familias más vulnerables mediante bonos. Con ese dinero ahorrado, el Estado podría focalizarse hacia nuevas inversiones en ámbitos como el educativo, salud, etc.

Por otra parte, se encuentran la eliminación del anticipo del impuesto a la renta y la eliminación de las tasas tributarias para los implementos tecnológicos. Ambas propuestas conducen hacia el buen camino de poder oxigenar el bolsillo de los ecuatorianos y brindar facilidades para la creación de nuevos emprendimientos. Es probable que estas medidas generen muchas críticas y quizás la Asamblea se encuentre reacia a aceptarlas; sin embargo, son medidas que necesita el país si quiere mejorar su situación económica actual.

Jorge Chuya