Al hablar de la historia del petróleo en Ecuador, que empezó en Ancón, es imposible no destacar el aporte que hicieron los carpinteros de la parroquia Atahualpa.

Santiago Reyes, de 92 años, relata que las primeras torres que se hicieron sobre los pozos de extracción de petróleo eran de madera.

Pero no solo en eso aportaron, pues también fueron quienes construyeron las casas de madera del barrio inglés de Ancón, que hoy encantan a los turistas.

Raymundo Yagual, de 86 años, fue uno de los expertos en la madera que trabajaron directamente para la Anglo, edificando las viviendas para el personal.

Sus manos encallecidas cuentan de esos días del boom petrolero, pero llegó la fecha en que las torres se empezaron a hacer de metal y las casas de cemento. Entonces, Yagual y Reyes regresaron a hacer muebles y las carrocerías de madera para carros, las famosas chivas.

¿Por qué no les afectó el dejar de hacer las torres de madera? Porque desde la época de trabajo en Anglo su servicio ya estaba diversificado. Una lección de vida que le faltó al sector de los exportadores. LZA