“La rebusca va a estar mejor que la yapa”, comenta entre risas un grupo de clientes al pie del Comercial Tapia. Están en el centro de Guayaquil, calles Manabí y Coronel, esperan que les despachen el producto solicitado.

Celebran que los frutos secos están más económicos. La libra de nuez cuesta $ 5 y la de almendra, $ 6. Al desconocer los nuevos precios llegaron al local con un presupuesto mayor. El año pasado la libra de los frutos secos costaban entre 8 y 10 dólares.

Con el vuelto, unas llevan más alimentos y otras lo guardan en su cartera. La acción de no devolver los dólares que sobran de la compra, a eso llaman la ‘rebusca’. El acto era común el siglo pasado, los muchachos se quedaban con el vuelto para ir al cine o comprar la famosa golosina de la época, el Límber.

Hay tiempo para recordar esos días, el local está lleno de clientes. Es el mediodía y la última ficha del turno es la 67. Recién atienden a la persona que tiene el número 50.

Las personas que ponen color a la espera vivieron la época en que todos los comerciantes daban un poco más del producto comprado, eso era la yapa (del quichua llapay= añadir).

La clientela se alegra de que los ingredientes para el relleno están más económicos. Se preguntan la razón y asumen que hay una extensión del Viernes Negro. Pero no es así, el administrador del Comercial Tapia explica que hay más producción de nueces y almendras en Chile y California y ello influye en que baje el precio.

Mediante un recorrido Diario EXPRESO confirma que la rebaja del precio no es en un solo local. En los minimarkets de los barrios del sur de la ciudad también está la ganga. Allí la libra de los frutos secos están a $ 6,50. En estas tiendas se dice que recién se siente en el bolsillo el no cobro de las sobretasas. Han pasado 17 meses para ello. La eliminación del cobro de las sobretasas fue en junio de 2017.

En los locales del norte, se habla de que también apoya a los precios bajos el acuerdo comercial con la Unión Europea. El relleno lleva licor y los europeos hacen un guiño al bolsillo, se encuentran vinos desde cinco dólares.

Los comerciantes que venden los ingredientes para el relleno del pavo u otros platillos típicos de esta época, que llevan frutos secos, estiman que las ventas subirán un 80 %.

Hay optimismo y ello lo confirma hasta el incremento de las importaciones de nueces, almendras y pasas que ha hecho el país. Ecuador hasta octubre de este año compró al mundo un 32,13 % más de uvas frescas o secas, que en octubre de 2017, según el Banco Central de Ecuador.

Los vendedores dicen que los precios bajaron un 25 %, y ello va a animar a que más personas se animen a comprar.

Para los comerciantes hoy empieza su Navidad, porque es quincena, hay décimo y es el penúltimo fin de semana antes de que llegue el 25 de diciembre.

Los precios han retrocedido al 2012, año en que en los mercados populares la libra de nuez costaba $ 6, según publicaciones periodísticas de EXPRESO. En esa época la cena, para 20 personas, con un pavo de 9 kilos y relleno costaba $ 63,19.

La tradicional cena hecha en casa, sin bebidas, tendrá un costo de $ 3 por persona; lo que es el mejor regalo navideño para el bolsillo.

El valor agregado

La asesoría para una rica comida

En el recorrido por los locales especializados en la venta de frutos secos, se encontró El Paraíso de las especias, ubicado en Colón y Pichincha.

El local tiene un máster en gastronomía que da asesoría para la cena. Entre las recomendaciones está usar sal rosada, de Himalaya y finas hierbas.

Su dueño, Rosendo Tapia, dice que desde el lunes tendrá ofertas y que en Facebook enseñan el uso de cada especia.