Agazapado entre las sombras ha permanecido “León”, un personaje clave en la red narcodelictiva de Leandro Norero y el prófugo Xavier Jordán. Una mención a León sucede el 21 de julio de 2022. En ese tiempo, Norero se encontraba preso en la Cárcel Regional de Cotopaxi, controlada por la organización criminal Los Lobos. 

Agobiado por su juicio de lavado de activos y por estar casi dos meses preso, Norero se impacientaba por tener dinero para comprar a jueces, policías, guía penitenciarios, peritos o, de plano, comprar su impunidad.

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Un aliado para conseguir y para mover el dinero entre Estados Unidos y Ecuador fue León. “Ñaño, si me recibes 250k allá en transferencias y me pasas acá” (sic), le plantea Norero a su socio Jordán, que entonces residía en Miami.

“De una, dime de dónde viene eso”, le escribe Jordán. “De allá mismo”, contesta Norero. “León. Ya te paso la cuenta, de una”, replica Jordán, quien había salido del país en 2020, poco antes de los allanamientos contra una red de corrupción en la venta de insumos médicos en los hospitales del IESS, en especial en el Teodoro Maldonado de Guayaquil.

Para Norero, su arresto fue un golpe a su empresa criminal. En parte porque la Policía y la Fiscalía le descubrieron sus bienes producto del narcotráfico y la justicia congeló cuentas por casi 12 millones de dólares. Norero tenía otras propiedades que no habían sido detectadas, pues estaban a nombre de otras personas. Eran su respaldo, pero con Jordán se queja amargamente porque sus ‘prestanombres’ o ‘administradores’ lo trataban como si estuviera muerto, en especial “Clemente”, un abogado que le escondía una casa en Salinas.

Norero le confiesa que los únicos fieles son Jordán y León. “¿Los que te debían sí te están pagando? Aquí se ve a los amigos hp, cuando uno está jodido”, dice Jordán. “Ñaño, la verdad los únicos que me han dado la mano eres tú y ese man de León, que por ahí me ha dado algo de lo mío”, contesta.

Para el 22 de julio de 2022 todavía no había resuelto el envío de dinero desde Estados Unidos al Ecuador. Norero vuelve a nombrar a León, pero esta vez deja caer otro dato sobre su identidad: “Dame la cuenta para esa transferencia de Byron. Pasa la cuenta para que me giren”, dice el narcotraficante, quien fue asesinado en la cárcel de Cotopaxi por alias Pipo, líder de Los Lobos, según se entiende de los chats en el caso Purga. Byron y León. Son los únicos nombres del personaje que, según Norero y Jordán, tiene la capacidad económica para mover un cuarto de millón de dólares entre dos países mientras goza de la confianza de la mafia.

En Miami está registrada la empresa San Leo LLC, ubicada en Miami. En 2017 tenía como ejecutivos a Byron León y su padre Heraclio León. Este último fue el que en 2021, en calidad de gerente de Dabolep, compró la casa de Riberas del Batán de Xavier Jordán y se la vendió a LionFF Realty Inc, cuya presidenta es Lina Romero, esposa de Leandro Norero. Al estar esa casa incautada, así como otros 11 inmuebles, el dinero provenía de otros negocios.

En Miami, San Leo LLC tiene la misma dirección que la vivienda de Juan Antonio Rubio Fernández, un guayaquileño de 60 años que es el mayor accionista de Activalores, una casa de valores que opera en las Bolsas de Valores de Quito y Guayaquil, y cuya sede está en el piso 11, oficinas 1111 y 1112, del Sky Building, en el norte de Guayaquil, según la Superintendencia de Compañías.

EXPRESO ya publicó el entramado de firmas que hay alrededor de Byron León y Heraclio León, a quienes se los ha buscado, pero no respondieron. La contadora de Dabolep, Sandra Morán, es a su vez contadora de PMB Negocios, Ecuadormecano y Briegleb. Todas ubicadas en el piso 11 del Sky Building, oficina 1117, en donde también están las sociedades anónimas Interfood, Ilusioncorp, Operaciones Estructuradas Opecom, Plan B, Jellyfish, Enefti, Seatiel.

La Frase:

"Norero y Jordán eran las cabezas de una red de corrupción para lavar", Diana Salazar, fiscal general del Estado.

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