La tarde de este lunes 19 de septiembre del 2022, los padres del teniente de Policía Germán Cáceres acudieron a la Fiscalía para rendir su versión sobre el caso en el que su hijo, quien se encuentra prófugo, está involucrado: la desaparición de su esposa, la abogada María Belén Bernal.

La mujer, de 34 años, fue vista por última vez la madrugada del domingo 11 de septiembre cuando fue a visitar a Cáceres en la Escuela de Superior de Policía, en el norte de Quito.

Desde ese entonces se han vinculado a 10 personas a la investigación, entre ellas, Josselyn Sánchez, una cadete que supuestamente habría escuchado los gritos de auxilio de Bernal que provenían del dormitorio del oficial.

El abogado de la cadete, Gonzalo Realpe, indicó afuera de la Unidad de Flagrancia que los padres del teniente fueron llamados a dar sus declaraciones, pero enfatizó que es una situación rara. “Ellos no tienen la obligación de decir nada. La ley les permite ser encubridores de sus hijos”.

Realpe añadió que dichas versiones no aportarán en nada a la investigación judicial. El jurista dijo que deberían llamar al director de la escuela y a los policías que estaban patrullando la noche en la que desapareció Bernal.

“Han acudido por la presión de la Fiscalía y de la ciudadanía”.

Con respecto a su defendida, Realpe indicó que apeló a la prisión preventiva y añadió que en los próximos días presentará un hábeas corpus a favor de la cadete.

Mientras tanto, en los exteriores de la entidad continúan los plantones por parte de colectivos feministas y organizaciones de Derechos Humanos.