Un tribunal suspendiól brasileño provisionalmente la licitación con la que el Ejército pretendía adquirir 98 blindados italianos Centauro II por 900 millones de euros (945,8 millones de dólares), cuyo contrato sería firmado este lunes 5 de diciembre de 2022.

La decisión, de carácter cautelar, fue dictada por el magistrado Wilson Alves de Souza, integrante del Tribunal Regional Federal de la primera región (TRF1), con el argumento de que no es una prioridad para el país ni una emergencia.

La sentencia suspende provisionalmente la licitación lanzada en marzo del año pasado y cuyo vencedor, el consorcio italiano Iveco-Oto Melara (CIO), fue anunciado en noviembre pasado.

El contrato prevé la adquisición de 98 unidades del blindado de modelo Centauro II, cuyas dos primeras unidades serían entregadas en seis meses, que constituiría el primer lote de una compra del Ejército de 221 blindados para modernizar su flota hasta 2037.

La compra del Gobierno del presidente Jair Bolsonaro fue denunciada por un abogado ante la Justicia por ser considerada inapropiada en un momento en que el Gobierno realiza recortes en los gastos públicos para impedir un agravamiento en el déficit fiscal.

La denuncia fue presentada poco después de que el equipo de transición de presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, cuestionara la adquisición y solicitara su aplazamiento para que el Gobierno que asume el 1 de enero pueda analizarla.

La diputada Gleisi Hoffmann, presidenta del Partido de los Trabajadores (PT), la formación fundada y liderada por Lula, calificó esta compra de blindados como "una inmoralidad ante la actual situación caótica de las cuentas públicas".

Para el juez, la adquisición no puede ser considerada como urgente para el país por tratarse de un número irrisorio de blindados, que representan el 5 % de la flota, por estar en tiempos de paz y debido a que el Ejército cuenta con modelos tan modernos como los pretendidos.

"El acto denunciado no atiende los requisitos de conveniencia y oportunidad pues es evidente la falta de raciocinio, el desvío de la finalidad, la ilegalidad y hasta la mínima falta de buen sentido. No se le pude dar otra clasificación cuando al mismo tiempo en que se hacen recortes en los recursos para la educación y la salud por falta de dinero, se pretende comprar armas en tiempos de paz", afirmó el magistrado.

Según la sentencia, la necesidad urgente de los equipos se justificaría si el país estuviera en guerra inminente o actual o con su soberanía amenazada.

Los Centauro II, conocidos como "cazatanques", son blindados con tracción 8x8 y 720 caballos de potencia que están equipados con cañones de 120 milímetros de largo alcance