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Humo se eleva sobre la ciudad durante los continuos combates entre el ejército sudanés y paramilitares de las Rapid Support Forces (RSF) en Jartum, Sudán, el 19 de abril de 2023STRINGER

Las treguas no sirven para frenar los duros combates en Sudán

El Ejército y el poderoso grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR)  no bajan la guardia 

Una nueva tregua de 24 horas entró en vigor este miércoles 19 de abril en Sudán, pero los combates entre el Ejército y el poderoso grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) no cesaron y continuaron los bombardeos y disparos de artillería en Jartum y otras ciudades del país.

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Esta es el segundo cese de hostilidades que incumplen ambas partes enfrentadas desde hace cinco días, puesto que el martes el Ejército y las FAR acordaron a petición de Estados Unidos un armisticio de 24 horas que tampoco cumplieron en ningún momento.

Los violentos choques han dejado ya más de 270 civiles muertos y más de 2.000 heridos, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), mientras que el Sindicato de Médicos de Sudán advierte que la cifra de víctimas podría ser mucho mayor por la incapacidad de los equipos de emergencia de acceder a ciertas zonas.

La tregua fue anunciada en un primer momento por las FAR, que indicaron en su cuenta de Twitter que daría inicio a las 18.00 hora local (16.00 GMT) y que se alargaría hasta la misma hora del día anterior.

"Afirmamos nuestro compromiso con el alto el fuego integral y esperamos que la otra parte cumpla con la tregua según las fechas anunciadas", indicaron los paramilitares. Por su parte, las Fuerzas Armadas sudanesas anunciaron su adhesión al alto el fuego poco después de que entrara en vigor.

Según un comunicado de los uniformados, este cese de hostilidades tiene el objetivo de "facilitar los aspectos humanitarios, bajo la condición de que la otra parte se comprometa con las obligaciones de la tregua".

Sin embargo, según pudo constatar, los enfrentamientos continuaron en la capital, Jartum, especialmente en los puntos en disputa: el Palacio Republicano y las inmediaciones de la comandancia de operaciones del Ejército, donde el sonido de las explosiones y de los disparos de artillería no han cesado en cinco días.

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Ante la incapacidad del Ejército y las FAR de comprometerse con cesar las hostilidades, varias han sido las llamadas y las súplicas para dar tregua a la población sudanesa.

Una quincena de embajadas occidentales en Sudán, entre ellas la española, exigieron este miércoles a las partes que "pongan fin a las hostilidades de inmediato y sin condiciones" y que se sienten a dialogar para resolver sus diferencias.

Asimismo, la Liga Árabe exigió también un armisticio, al menos, de cara a la festividad del Aíd al Fitr, que pone fin al mes sagrado musulmán de ramadán, durante el cual los fieles tienen prohibido beber y comer durante las horas diurnas.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Sudán dijo hoy que los hospitales del país africano "se están quedando peligrosamente bajos en suministros", mientras que los centros se han quedado "sin electricidad ni agua potable" a causa de los intensos combates.

El CICR indicó que la prioridad más urgente es distribuir asistencia médica a los centros médicos y tratar de reparar sus líneas de agua y de energía para que puedan atender a los heridos, y lamentó que si continúan los combates la organización no podrá entregar los suministros necesarios ni evaluar las necesidades humanitarias.

El Sindicato de Médicos de Sudán, por su parte, alertó hoy de que más de la mitad de los hospitales de Jartum y de los estados vecinos se encuentran fuera de servicio, mientras que el resto están en riesgo de cierre por falta de personal médico y suministros.

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Los médicos sudaneses han estado alertando en los últimos días de que los hospitales están siendo "blancos de ataque" por parte del Ejército y las FAR, lo que ha provocado que cientos de pacientes se hayan quedado atrapados en las instalaciones, mientras que muchos heridos han muerto y los familiares de los fallecidos no han podido enterrar a sus seres queridos.