El Colegio de Profesores, el gremio educativo más importante de Chile, decidió este viernes 1 de septiembre poner fin al paro nacional indefinido iniciado el martes, pero rechazó la nueva propuesta del Gobierno a sus demandas laborales.

"Las bases han hablado y han manifestado que el camino es deponer el paro", anunció el presidente del gremio, Carlos Díaz, tras someter a votación entre más de 50.000 docentes tanto la decisión de suspender la huelga como el rechazo a la oferta.

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El líder sindical indicó que solicitarán "todas las garantías y todas las condiciones para que los colegas, los establecimientos educacionales, las comunidades escolares, puedan desarrollar las recuperaciones de clases que corresponda".

Entre las demandas que reclaman están cambios en la jornada escolar, un bono para los profesores jubilados, medidas para mitigar tanto la violencia en los establecimientos escolares como el estrés laboral y la denominada "deuda histórica".

La "deuda histórica" es el perjuicio salarial que sufrieron miles de profesoras de escuelas públicas durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), cuando la administración de los establecimientos fue traspasada desde el Estado a las municipalidades, lo que impidió que los profesionales recibieran el reajuste salarial que estaba contemplado.

El Ministerio de Educación propone solucionar primero el perjuicio salarial al 25 % de los afectados a través de un proyecto ley que se presentará en diciembre, pero el gremio pide que sea para el total de los afectados.

Pese al anuncio del fin del paro, en ciudades como Valparaíso, a 110 kilómetros al este de Santiago, continuaron con las movilizaciones.

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"Hoy día un bloque importante de estudiantes de Valparaíso están viendo vulnerado su derecho a la educación a propósito que el mismo Estado no garantiza las condiciones mínimas para que ellos puedan recibir educación de calidad", dijo a EFE la presidenta de la Asociación de Funcionarios Asistentes de la Educación de Valparaíso (AFEV), Violeta Serey.

La docente explicó que cuando hay temporales, como el ocurrido hace unas semanas, "la mayoría de los centros no pueden funcionar con normalidad" y aseguró que "la movilización es la herramienta que tenemos para visibilizar nuestra demanda".

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