La Guardia Civil española desarticuló una banda acusada de tráfico de droga entre Sudamérica y Europa, en una operación con ocho detenidos, de los que siete fueron enviados a prisión provisional.

Según informó la Guardia Civil, la droga iba oculta en contenedores en barcos desde países como Brasil y Colombia a puertos de España, Italia y Países Bajos.

La organización se valía supuestamente de una empresa de alquiler de coches de lujo para introducir la droga en la isla española de Ibiza (Mediterráneo) y para blanquear, junto a otras empresas, el beneficio económico del narcotráfico, destacó en un comunicado.

La Guardia Civil intervino 19 vehículos, la mayoría de alta gama, valorados en 2 millones de euros, diferentes tipos de drogas, entre ellas 7,3 kilos de cocaína y 14 de hachís, unos 127.000 euros en efectivo, una pistola con munición y un arma corta simulada. 

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