Una mujer, supuestamente en contra de las figuras religiosas, empujó una escultura de madera de Jesús del Gran Poder, que estaba ubicada en uno de los altares de la iglesia San Francisco, situada en las calles Pedro Carbo y 9 de Octubre, en el centro de Guayaquil.

“Se debe adorar a un Dios vivo y no muerto”, gritó la fémina al empujar hacia adelante a la imagen, según contó el fray Francisco Meza, superior del Convento de San Francisco.

Meza indicó que la fémina aprovechó que el sacerdote estaba dando la comunión, para trepar un muro con base metálica, apoyar las manos en la madera, y lanzar la efigie. Sin embargo, minutos antes, la dama oraba frente a la escultura de madera.

Aquello ocurrió en la misa del mediodía de este domingo 10 de noviembre del 2019. La implicada fue entregada a la policía y luego la llevaron a la Fiscalía de Flagrancia, donde debe enfrentar una audiencia de formulación.

Según pudo conocer EXTRA, la mujer podría enfrentar un proceso judicial por el delito de daño a bien ajeno.

Producto de la caída, a la figura se le rompieron las manos, la corona y una cruz que cargaba.