El presidente Lenín Moreno afirmó, la noche de este jueves 3 de octubre, en Guayaquil, que se evidencia un intento de desestabilizar al país y al Gobierno, y advirtió a quienes violen la ley que se atengan a las consecuencias.

“La tarea fundamental de mi presencia acá, al igual que la de los ministros, las Fuerzas Armadas y la Policía, es evitar que aquellos que saquearon el país, sigan saqueando en otras instancias al Ecuador. No lo vamos a permitir, las personas que violen la ley definitivamente deberán serán detenidas”, expresó el gobernante en rueda de prensa, desde la Base Aérea Simón Bolívar.

Informó que llegó a ciudad para participar en la dirección de los operativos, desde el ECU 911, para aplacar las manifestaciones de violencia y saqueos y tratar de “recuperar la paz y la calma”.

Tras insistir en que a los golpistas “el Ecuador les está diciendo no”, el mandatario se retiró a seguir trabajando antes de volver a Quito, probablemente horas más tarde.

Ni Moreno ni ninguna autoridad ha mencionado hasta ahora la existencia de una declaratoria de toque de queda en el país, como se está afirmando en las redes sociales.