Una joven, de 19 años, fue condenada a tres días de prisión porque supuestamente ‘puñeteó’ a dos mujeres agentes de Tránsito, quienes solo le pedían la licencia, luego de que ella, al parecer, haya cometido una infracción. En la audiencia, sus alegatos frente al juez no la salvaron de pedir disculpas a las víctimas. Ni de ‘cana’.

El ataque ocurrió la noche del miércoles mientras las agentes realizaban controles del ‘Hoy no circula’ en la calle John F. Kennedy, sector de El Condado, norte de Quito.

Según los testimonios de las agredidas, una de ellas paró a la conductora de un auto rojo para solicitarle los papeles. El motivo: que circulaba con las luces apagadas.

La conductora se habría negado a la petición con una frase: “Mi papá les paga los sueldos”. Parqueó e iba a una tienda de mascotas. La agente insistió en el pedido, pero a cambio recibió un tremendo golpe en el pómulo. “Quedé anonadada”, recuerda la víctima, quien asegura que incluso la joven habría querido arrancar el automotor con la funcionaria en el camino.

La otra agente, al ver el ataque, se acercó a la conductora para reclamarle. También recibió lo suyo. Un puñetazo en la nariz, que la dejó sangrando por un buen rato. Entonces hubo que darle atención médica en una ambulancia.

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La gente empezó a agruparse para ver lo que sucedía y otro agente se acercó para ayudarlas. Llamaron refuerzos de la Agencia Metropolitana de Control (AMT) y de la Policía Nacional. Impidieron que se fuera del lugar.

En la audiencia de juzgamiento, la acusada explicó al juez que llevaba un perro atropellado y que necesitaba atención veterinaria urgente y que el pedido de la agente habría sido en tono grosero.

Alegó, además, que la compañera de ella la habría halado del cabello y que su reacción fue dar el puñetazo. Que fue retenida y que en el transcurso de la noche del miércoles los agentes civiles le lanzaron gas lacrimógeno. Intentó presentar vídeos, pero al estar fuera de tiempo establecido no se tomaron en cuenta.

Las agredidas negaron esas acusaciones. “Como servidores públicos no podemos responder a las agresiones”, dijo una de ellas.

Desde la AMT

Expuestos al peligro

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En la audiencia llevada a cabo la tarde del jueves, el juez de Tránsito escuchó los argumentos de ambas partes y sentenció a la mujer con tres días de prisión, un salario mínimo como multa y como reparación a las víctimas debió pedir disculpas públicas.

La AMT emitió un comunicado en el que rechaza las agresiones a los miembros de sus filas y enfatizó en que están expuestos a peligros y a la vulneración de su integridad.

En cuanto a las acusaciones de la agresora, el juez estableció que la AMT investigue la acción de los agentes que retuvieron a la joven y que sea la entidad la que determine las sanciones de hallar alguna anormalidad.

Otro caso

En octubre un taxista cacheteó a un agente civil en el sector de Carapungo. En ese caso las partes llegaron a un acuerdo.