Todos los seres humanos debemos comprender que no existe nada en el mundo que pueda justificar un homicidio y mucho menos un asesinato. Considerando que este año la cifra de femicidios alcanzó niveles alarmantes en el país, hagamos conciencia de que somos pecadores por naturaleza y aprendamos a perdonar para que Dios tenga piedad y misericordia de nosotros. Si lo hacemos y no permitimos que condenables sentimientos de odio se apoderen de nosotros, viviremos en paz y sin arrepentirnos jamás por haber tomado fatales decisiones. Pongamos en práctica el amor verdadero, como el que Jesucristo predicó y demostró hacia la humanidad. Feliz año nuevo 2018 para todos los ecuatorianos.

Lic. Jhonny Muñoz Lima