Los intelectuales marxistas fallaron en su sueño de convertir al Ecuador en colonia cubana. Su traición a la república es ya página negra de la historia. Disfrazaron con palabrería una dictadura totalitaria como ‘revolución progresista’. Juraron lealtad al eterno tirano Castro para ofrendarle nuestras libertades y derechos. Durante 10 años racionalizaron con palabrería hueca la corrupción chavista, queriendo aplicar con engaños ese modelo en nuestra tierra. Hoy se derrumba este experimento social y los intelectuales apátridas están plenamente identicados. Que no vengan con su cantaleta de que el gobierno no era de ‘izquierda’. Quisieron sacrificar nuestra patria por salvar una ideología fracasada.

Paul Tapia Goya