Ecuador no puede ser un país pobre. Hay que ir a los diferentes mercados o tiendas de expendio donde cantidades y diversidad de productos como frutas, hortalizas, vegetales y cereales se desperdician.

Las autoridades de control de precios los mantienen bajos y no varían. Los expendedores son pobres, pero existe gran demanda de productos y los consumidores se quejan del alto precio, que comparados con países vecinos son baratos. La pobreza existe por gobernantes ladrones. Pesan las millonarias sumas de dinero que usurpan de las arcas y no son castigados por autoridades cómplices del cohecho, mientras, el pueblo clama por puestos de trabajo.

Héctor García Rivera