Un tribunal de la Corte de Pichincha negó ayer el recurso de hábeas corpus solicitado por Eduardo Valderrama. Él era contratista de Petroecuador.

Desde noviembre es procesado por el presunto delito de delincuencia organizada junto con Marco Calvopiña, exgerente de la petrolera estatal, y Diego Tapia, exsubgerente de la Refinería de Esmeraldas. Los tres están detenidos.

Al negar el recurso, los jueces consideraron que existe peligro de fuga y una supuesta destrucción de evidencia. Esas justificaciones sorprendieron a Reinaldo Zambrano, abogado de Valderrama.

Según él, esos argumentos no se presentaron ni en la audiencia de formulación de cargos ni en la apelación de la prisión preventiva. Aseguró que la resolución “solo demuestra que en Ecuador no existe seguridad jurídica”. Insistió en que su cliente fue detenido arbitrariamente.

Zambrano se concentrará en demostrar que no existe un solo elemento de convicción en contra de su defendido.

Mientras tanto la instrucción sigue. El fiscal Franklin Bravo hizo varios requerimientos. Al gerente de Petroecuador solicitó los nombres de las personas que trabajaron con Calvopiña, Tapia y Valderrama, así como los números de contratos en los que participaron.

El 4 de enero habrá una audiencia privada para el peritaje de evidencias.