El riesgo es alto y no existe un pronunciamiento final. Por casi cuatro horas, el Concejo Metropolitano del Municipio de Quito se reunió para conocer los avances en el modelo de gestión que tendrá el Metro de la ciudad. La discusión de hoy, 7 de enero de 2021, terminó sin una resolución porque el alcalde Jorge Yunda abandonó el encuentro.

La sesión, que deberá contar con la presencia del personero principal de la ciudad, y se desarrollará el 12 de enero. Ahí se discutirán las dos alternativas que hay para el Metro: una alianza público-privada para su operación o su concesión total al sector privado.

Consultorías presentadas antes de que Yunda deje la sesión por una llamada telefónica evidenciaban que la alianza es viable pero poco práctica. Una alianza funciona, explicó el consultor Juan Pablo Aguilar, cuando las dos partes aportan algo diferente y complementario para una actividad económica o productiva. En la operación del Metro de Quito, entonces, no cabe la figura de una alianza.

La idea de concesión, en cambio, no convence a los concejales que temen transferir una obra de más de 2.000 millones de dólares al sector privado.

El personal que expuso los puntos a favor y en contra de las dos alternativas resaltó que hay diez operadores privados interesados pero dos tienen mejores condiciones. Ellos quieren trabajar siempre y cuando estén a cargo también de las rutas de transporte en la ciudad.

Los concejales cuestionaron las posturas y hasta afirmaron que se insulta la inteligencia de los integrantes del Municipio porque se repite información poco útil.