El exvicepresidente de la República, Jorge David Glas Espinel, acaba de sumar una acusación más en su contra. Esta vez, por el delito de acoso, luego de que su exsecretaria, Soledad Padilla, asentara en la Fiscalía una denuncia formal.

Padilla ha recurrido ante la Fiscalía para denunciar de forma escrita que Glas la habría presionado para mantener una relación sentimental, pero ella se habría negado. De esta situación se han viralizado audios en los que se escucha a ambos discutiendo.

En respuesta a estos señalamientos, el exvicepresidente correísta puso una denuncia en contra de Padilla, por el delito de extorsión. Esto se confirma en los registros del Ministerio Público, que con fecha 18 de octubre de 2023, muestra la acusación presentada por Glas, en Guayaquil.

• (Le puede interesar también: Los errores de la derecha podrían abrir el camino al correato en 2025) 

Padilla señaló en su escrito que cuando era funcionaria de la Prefectura de Pichincha visitaba constantemente a Glas en la prisión de Latacunga. La institución emitió un comunicado en el que confirmó que sí fue funcionaria pero que también fue separada de la misma.

Jorge Glas fue vicepresidente desde el 24 de mayo de 2013 hasta el 6 de enero de 2018, durante los gobiernos de la Revolución Ciudadana, con los presidentes Rafael Correa Delgado y Lenín Moreno. Con este último perdió su cargo y luego terminó en prisión.

Glas fue investigado por asociación ilícita por el caso Odebrecht y en otro proceso por el caso Singue, relacionado con la adjudicación y explotación de un campo petrolero en la Amazonía ecuatoriana.

• (Le invitamos a leer: Construye no impugnará resultados para acelerar la posesión de Daniel Noboa)

De su lado, Glas expuso que esta situación es el resultado de "otra campaña de infamias y calumnias en su contra". Y que una vez más sus abogados se encargaran de atender el caso que según expuso: "el único objetivo es mancillar" su honra y reputación luego de ejecutar acciones legales. 

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!