La mañana del sábado 5 de octubre, 38 voluntarios y nueve oficiales fueron retenidos en la comunidad Nizag, de Alausí (provincia de Chimborazo). Ellos escoltaban siete trailers desde Riobamba hacia Cuenca. Habían salido desde a las 12:00. Se movilizaban por el paro nacional.

En cada sitio que pasaban dialogaban con los manifestantes y avanzaban. Removían los escombros, la tierra, piedras y luego de pasar dejaban los materiales en su sitio y seguían su camino, informó una fuente consultada por EXPRESO.

Llegaron a Guamote y, en ese punto, se presentó el inconveniente más fuerte que debían superar. Con la ayuda de otro grupo de militares, lograron pasar sin inconvenientes.

En el sector de la Vía Flores Guamote Macas tuvieron que esperar una hora según los requerimientos de la comunidad y para no provocar a los manifestantes esperaron en cada punto. En su trayecto, los militares encontraron manifestantes en estado etílico pero los uniformados negociaban el paso de 17 unidades que tenía el convoy y avanzaban. En cada punto del camino los militares eran recibidos con insultos y eran llamados ‘traidores’ contó una fuente. Sin dormir por toda la noche, avanzaron hasta aproximadamente las 05:40 que llegaron a Nizag y encontraron gente protestando. Un grupo de militares fue a negociar el paso y fueron recibidos con piedras, algunos militares fueron heridos y para defenderse lanzaron gas. En ese punto los indígenas retuvieron a un herido y lo agredieron. Él presenta varias lesiones, según contaron los militares a este Diario. Los uniformados se juntaron y fueron a verle. Los comuneros les habrían engañado diciendo que sólo querían dialogar. En ese momento, los retuvieron. Al medio día llegó una comitiva de la Policía y también fue retenida.

Los dos grupos de uniformados permanecen en la comunidad. Recibieron alimentos: arroz con huevo, arroz con gallina y morocho, contó un militar. Hasta el momento, la retención sigue.

El Dato:

Según fuentes de este diario, se espera que a las 10:00 se integren cerca de 1000 indígenas más a las protestas. Los representantes tendrían una reunión vía video con las autoridades ecuatorianas.

Las armas que tienen los militares no son letales. Son disparadores de material antimotines. A las 11:30 del domingo 6 de octubre habrían iniciado a negociar con la comunidad.