El Cuerpo de Bomberos de Quito declaró este lunes 29 de enero extinguido el incendio forestal en la Reserva Ecológica de El Ángel, en la provincia andina de Carchi, fronteriza con Colombia, que afectó desde el pasado sábado unas 800 hectáreas de páramo.

"En la Reserva Ecológica El Ángel, mediante sobrevuelo, nuestro personal constató que tras las labores de control el incendio se encuentra extinguido", afirmó el jefe el Cuerpo de Bomberos de Quito, Esteban Cárdenas, en un mensaje a través de su cuenta en la red X.

SIGUE LEYENDO: El incendio de los cerros de Bogotá "está en control" aunque sigue activo

Cárdenas añadió que los equipos de bomberos que actuaron para sofocar el flagelo "permanecen en vigilancia y monitoreo; para posteriormente medir el área afectada".

Las unidades de bomberos de Quito se unieron a otras de la provincia de Carchi y de la vecina Imbabura para controlar el fuego desatado el pasado sábado en la zona de El Ángel, un páramo andino de pajonales y arbustos entre los 3.200 y los 4.200 metros de altitud, donde se destacan los frailejones, y cuya extensión supera las 16.500 hectáreas.

El sábado, la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR) había informado de que por "causas desconocidas" se suscitó un incendio forestal en la zona de amortiguamiento de la Reserva Ecológica El Ángel", en el cantón (municipio) de Espejo, perteneciente a la provincia de Carchi.

El incendio encendió las alarmas en Ecuador, pues se produjo en un momento en que en la vecina Colombia se extremaban esfuerzos para controlar una serie de flagelos forestales en varias zonas de ese país.

El presidente colombiano, Gustavo Petro, incluso advirtió de que los incendios podrían llegar en febrero a la región amazónica y al Pacífico, dos de las zonas más selváticas del país, por lo que dijo que hablaría con su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, para cuidar la selva.

Las autoridades colombianas han asegurado que algunos incendios han sido exacerbados por el intenso calor y la escasez de lluvias que vive el país por el fenómeno climático de El Niño, caracterizado por un aumento inusitado de la temperatura del mar, que genera lluvias torrenciales en la costa y sequía en la sierra andina.