La fiscal general no dirá quiénes presionaban
Esta semana Diana Salazar hizo un tour de medios tras los tres trinos que escribió en su cuenta de Twitter
La fiscal Diana Salazar dijo ayer que quiere dar por terminado el tema que ella puso en debate en Twitter con tres trinos escritos en esa red social.
El 14 de junio denunciaba que “mientras los procesados sigan en el poder será muy difícil que la justicia haga su trabajo con celeridad y transparencia. Veo con preocupación cómo algunas personas continúan gozando del respaldo de quienes les deben favores. Impensable”.
Y la respuesta del presidente de la República, Guillermo Lasso, fue para pedir a la funcionaria que precise “si algún funcionario de mi gobierno ha ejercido algún tipo de presión para proceder en consecuencia”. De inmediato ella aclaraba que era legítima la preocupación del mandatario, “pero no son funcionarios de su gobierno, sino exautoridades y personal de otras funciones y “ciudadanos ilustres”, quienes han querido incidir en favor de la revisión de medidas dispuestas al procesado Pablo C.”.
En una entrevista con el canal Teleamazonas, la fiscal Salazar explicó que las presiones venían de personas, amigos o cercanos a Celi y que por eso la respuesta fue pública “para que paren esas presiones, esas campañas de apoyo indicando que no existen elementos, que no existen pruebas”.
La funcionaria insistió en no decir los nombres que desde distintos sectores se invitó a hacerlos públicos.
Además dijo que ha tomado la decisión de cerrar el capítulo. “He conseguido el objetivo que es no recibir más presiones, más mensajes” y reiteró que desde ese entonces no han aparecido más esos ciudadanos.
Sobre la posibilidad de iniciar una investigación por lo denunciado por ella, aclaró que no se puede iniciar ningún expediente “porque son campañas de apoyo, estaríamos quizá coartando la libertad de expresión, todas las personas tienen el derecho de mostrar sus afectos o desafectos sobre uno u otro tema pero, por Dios, que no lo hagan ante la fiscal general que tiene que tomar las decisiones”.
Queremos nosotros llegar a los verdaderos beneficiarios de esos fondos.
Habló también del caso Inapapers, que en su momento involucró al expresidente Lenín Moreno y adelantó que próximamente habrá sorpresas.
Después de dos años de la denuncia dijo que se ha avanzado en un 50 % con la información recibida. Ofreció que va más allá y hacia personas que se beneficiaron en su momento con el proyecto Coca Codo Sinclair y lo calificó como un caso alarmante.
