El Equipo de Emergencias de Filipinas ha lanzado una complicada operación de búsqueda de cuatro pasajeros a bordo de una avioneta que se siniestró el pasado 18 de febrero cerca del cráter del volcán Mayon, en el norte del archipiélago y que presenta la segunda máxima alerta de erupción posible.

Según confirmó a EFE este 20 de febrero el portavoz de Emergencias en Camalig, Albay -en la norteña isla de Luzón, donde está el volcán Mayon-, Jom Anders, las lluvias, la escasa visibilidad y los obstáculos para acceder a las inmediaciones del cráter "están dificultando severamente" la operación de rescate.

El aparato, una aeronave Cessna 340 que se dirigía a Manila, se estrelló la mañana del sábado cerca del volcán Mayón apenas unos minutos después de despegar con cuatro pasajeros a bordo, dos de ellos de nacionalidad australiana, afirmó hoy a EFE el portavoz de la Aviación Civil de Filipinas, Eric Apolonio.

Las autoridades filipinas confirmaron el 19 de febrero haber encontrado los restos de la avioneta siniestrada cerca del cráter del volcán, muy activo y con peligro de expulsar ceniza volcánica inminentemente (nivel de alerta 2 de 4), en una zona donde los vehículos terrestres no pueden acceder con facilidad.

Las lluvias y la falta de visibilidad impiden por el momento a los helicópteros de Emergencias aterrizar en la zona, y esperan reanudar la operación de rescate mañana, martes, dijo a EFE Anders.

La empresa energética Energy Development, propietaria del aparato siniestrado, transmitió al medio local ABS-CBN el domingo la esperanza de que los pasajeros sean encontrados con vida.

Este es el segundo accidente de una avioneta Cessna en Filipinas desde que empezó el año. En enero, otro aparato de este tipo se estrelló presumiblemente en Sierra Madre, la cordillera que vertebra la isla de Luzón, sin que se hayan encontrado todavía los restos de la avioneta ni a sus tripulantes