Este 1 de agosto de 2022, la agencia Reuters informó que una autoridad judicial de Luxemburgo ordenó a los bancos que congelen los activos de Ecuador en las cuentas del país como resultado de una disputa sobre un acuerdo de 391 millones de dólares que la petrolera anglo-francesa Perenco dice que sigue sin pagar, según un documento al que tuvo acceso la agencia.

En junio de 2021 Ecuador se comprometió a pagar la deuda otorgada a Perenco por el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi) del Banco Mundial, que dictaminó que Ecuador había terminado ilegalmente un acuerdo de producción compartida con la compañía.

La posición del Gobierno de Ecuador señalaba que se encontraba negociando con Perenco para llegar a un acuerdo que permita cancelar el compromiso por partes. 

“Hasta la fecha, más de un año después, Perenco aún no ha recibido ni un solo dólar de Ecuador”, dijo Perenco en un comunicado el lunes, añadiendo que “tomará medidas para hacer valer sus derechos de pago contra Ecuador en Luxemburgo y otras jurisdicciones”.

EXPRESO ha pedido información al Ministerio de Economía y Finanzas y a la Procuraduría General del Estado, pero todavía no han emitido un pronunciamiento

¿Por qué Luxemburgo? En ese país se negocian los bonos de deuda ecuatoriana y se realizan los pagos de intereses de deuda a los inversionistas. 

Según Reuters, un agente judicial luxemburgués, Pierre Biel & Geoffrey Galle, ordenó el 28 de julio a 122 entidades bancarias que operan en Luxemburgo la congelación de activos en cuentas utilizadas por Ecuador en nombre de Perenco. Entre los bancos citados se encuentran Deutsche Bank, Credit Suisse y HSBC.

Hace dos años, Ecuador reestructuró su deuda en bonos soberanos por $ 17.400 millones debido a la crisis agravada por la pandemia de COVID-19. 

Como parte de la reestructuración de la deuda que siguió, Ecuador vendió nuevos bonos con vencimiento en 2030, 2035 y 2040 que cotizan en la bolsa de Luxemburgo.

Muchos de estos bonos tenían pagos de intereses que vencían el 31 de julio.

No estaba claro de inmediato qué impacto podría tener una congelación en la capacidad de Ecuador para hacer esos pagos.

El caso que dio lugar al laudo del CIADI se derivó de un decreto de 2007 emitido por el entonces presidente Rafael Correa que aumentaba las ganancias del Estado ecuatoriano por las ventas de petróleo generadas por empresas privadas que superaran un determinado nivel.

Perenco demandó a Ecuador en 2008 y finalmente recibió 412 millones de dólares en mayo del año pasado. Perenco tiene derecho a 391 millones de dólares, tras tener en cuenta la indemnización que se le ordenó pagar a Ecuador por los daños medioambientales causados en las zonas donde operaba en los bloques 7 y 21.