Una comitiva del Gobierno viajará a Bogotá el próximo viernes 2 de julio,    para asistir al acto protocolario donde se concederá a Ecuador la presidencia protémpore de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), una responsabilidad que desde ya asume con temas urgentes en la agenda.

Uno de ellos es lograr la articulación del trabajo de los países que conforman el organismo (Ecuador, Colombia, Perú y Bolivia) para    contrarrestar y prevenir los posibles efectos del Fusarium raza 4 tropical (R4T). “Una de las principales propuestas de Ecuador será la creación de fondos, programas, proyectos para hacer frente a los problemas fito y zoosanitario    de la subregión. Esto básicamente es proveer de asistencia técnica y financiera para tratar este tema”, dijo Julio José Prado, ministro de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, durante un encuentro que mantuvo esta tarde en Guayaquil con el secretario actual de la CAN, Jorge Hernando Pedraza, otras autoridades del país y los principales actores del sector bananero.

El hongo que se muestra como una amenaza letal para las plantaciones bananeras fue detectado en Colombia en agosto del 2019, y en Perú, en abril de este año. Si bien la plaga no está en Ecuador, el país, dicen las autoridades, unirá esfuerzos a nivel regional para tomar todas las medidas pertinentes, con plazos y metas fijas.

Una de las tareas que tendrá la nueva administración de la CAN es seguir negociando la ayuda financiera que los países requieren para adoptar acciones de control. Hernando Pedraza dijo que en su gestión se han llevado a cabo 17 gestiones, dentro de las cuales está la realizada con organismos multilaterales de cooperación, como el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) a fin de tener una ayuda económica en este tema. Igual pedido se ha hecho a la Embajadas de Estados Unidos en Perú y el representante de la Unión Europea en la región.

La ministra de agricultura, Tanlly Vera, también presente en la cita, dijo que uno de los pendientes urgentes es trabajar en investigación, para tener a la mano nuevas variables de cultivos resistentes al fusarium. A nivel de país, dijo, aún se sigue buscando alternativas de financiamiento para resolver necesidades, una de ellas incrementar el número de técnicos que capaciten y orienten a los agricultores.