Simpatizantes del expresidente Rafael Correa llegaron con anticipación y se reunieron en las afueras de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) mientras se desarrollaba la audiencia de vinculación en el caso del secuestro de Fernando Balda, ocurrido en Colombia en 2012.

Pese al apoyo, las decisiones no favorecieron ni a Correa ni a sus seguidores: él fue vinculado al caso por delito de asociación ilícita y plagio del exasambleísta. Solicitud que hizo previamente la Fiscalía y que pasó por revisión de la Asamblea. Por lo que la campaña #NoSeMetanConCorrea —impulsada por algunos legisladores— no dio los resultados esperados.

La jueza que lleva esta causa, Daniella Camacho, también dio otra orden: que el exmandatario se presente cada 15 días ante la CNJ, medida que deberá cumplirse desde el 2 de julio del 2018.

Una larga audiencia

A la hora marcada —13:00 del 18 de julio— se dio inicio a la instrucción fiscal donde estuvo presente Caupolicán Ochoa, defensor del expresidente Rafael Correa, y asambleístas que apoyaran al expresidente.

En el transcurso de la audiencia, el fiscal general Paúl Pérez, solicitó medidas cautelares en contra del expresidente —entre ellas, la presentación periódica ante la autoridad y el uso del dispositivo electrónico— y medidas de protección a favor de Fernando Balda y su familia.

El pasado viernes 8 de junio, Pérez pidió la vinculación de Correa en el caso. En el documento presentado señaló que “han aparecido datos de los que se presume la participación de otra persona”. También se solicitó el “enjuiciamiento penal” de Correa, quien cumplió funciones de presidente de la República desde 2007 hasta mayo de 2017.