El Tribunal Séptimo de Garantías Penales, en el norte de Quito, se repletó de testigos y peritos que se dieron cita ayer, en el inicio del juicio en contra de tres exdirectivos de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), entre ellos su expresidente Luis Chiriboga.

Debido a la extensa lista que intervendrá en el proceso judicial, las autoridades jurídicas decidieron llamarlos durante el transcurso de esta semana. En la diligencia estuvieron además Pedro Vera y Hugo Mora, excontador y extesorero de la FEF, respectivamente. Los tres implicados en lavado de activos.

Uno de los primeros interrogados fue un miembro de la Unidad de Análisis Financiero (UAF), quien explicó que la entidad realizó un informe sobre las actividades económicas de Luis Chiriboga desde 2010 a 2014. Según el integrante de la UAF, existieron “particularidades” en la indagación que se realizó a Chiriboga, como persona natural y no como presidente de la FEF, entre ellas irregularidades en la declaración económica entre el exdirectivo y una empresa de shows artísticos.

Antes del proceso, Juan Carlos Machuca, abogado defensor de Chiriboga, dijo que esas acusaciones no han sido probadas ni tampoco el supuesto origen ilícito del dinero que se habría usado por gastos personales investigados.

Diana Salazar, fiscal en el caso, detalló que a lo largo de la diligencia judicial se presentarán evidencias que probarían la culpabilidad del expresidente, así como de los otros implicados.

Las indagaciones señalan que alrededor de $ 6 millones no fueron justificados, tanto por derechos de mercadeo de shows futbolísticos (más de tres millones) como por el dinero entregado por la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), que ascendería a los dos millones. Hoy está previsto que continúe el proceso. MAG