“Todo niño que se exponga al sol, más aún en la playa, deberá usar gorra y vestir -en lo posible- trajes de baño de dos piezas (con camiseta de mangas y short). También deberá cubrir su piel con bloqueadores con un factor de protección mayor a 50, una hora antes a la exposición del sol; y repetir la aplicación cada cuatro horas. Hidratarlo será fundamental, esto evitará los episodios de insolación en ellos. En cuanto a los bebés, los menores de 6 meses no deben exponerse al sol ni usar protección solar. Ellos necesitan estar a cubierto en un lugar con buena sombra, ventilado, en los horarios permitidos y por poco tiempo”.

Patricia Ordóñez

Directora de Kinderzentrum

“Sabemos desde hace años que el sol a través de los rayos ultravioleta pueden causar enrojecimiento, envejecimiento cutáneo precoz, graves quemaduras de piel y hasta cáncer de piel. Los niños menores de 3 años son los más sensibles a los efectos nocivos del sol y ante ello recomiendo, además del uso de gorros, la aplicación de protectores solares con un factor de protección superior a 15 y, en el caso de infantes de piel clara, de 25 a 50. Otro de mis consejos se centran en la lectura de las etiquetas: no hay que comprar por comprar, sino adquirir bloqueadores de rayos UVA + UVB, llamados de amplio espectro y avalados por la FDA (Food and Drug Administration)”.

José Manuel Draxl

Médico / Pediatra