El Tribunal suspendió este 3 de abril de abril de 2024 la audiencia de apelación a la prisión preventiva, que presentó el abogado de Sebastián Barreiro, investigado en el caso Nene por supuesto tráfico de influencias.

Los jueces escucharon los argumentos de la defensa técnica del hijo de la vicepresidenta Verónica Abad. El fiscal Leonardo Alarcón solicitó al Tribunal que no se acepte la apelación a la prisión preventiva y que el sospechoso siga encarcelado. Barreiro está detenido en la cárcel La Roca.

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Alarcón sostuvo que Barreiro registra múltiples viajes fuera del país, por lo que "puede salir cualquier momento" al exterior. Entre otros argumentos, mencionó que entre los indicios contra el procesado se estableció que habría solicitado parte del sueldo de un funcionario de la Vicepresidencia.

Según Romel P., denunciante, él, Barreiro y otra persona se habrían reunido en diciembre de 2023 en un hotel de Quito, en donde el sospechoso le ofreció el puesto de coordinador general con un sueldo de 3.200 dólares.

Ese día le había indicado que por el cargo debía pagar 2.00 dólares, pero luego negociaron y acordaron que le entregaría 1.700 dólares. "Le convencieron de firmar una letra de cambio de 30.600 dólares" como respaldo del dinero que daría en un año, informó el Ministerio Público.

El abogado de Barreiro, Juan Carlos Salazar, alegó que la Fiscalía no presentó elementos de convicción suficientes en contra de su representado y cuestionó el señalamiento por supuesto del tráfico de influencias a raíz de una letra de cambio que habría sido firmada por un exfuncionario de Vicepresidencia que denunció al detenido.

También mencionó que Barreiro tiene familia y propiedades, lo cual justifica su arraigo.

El Tribunal dijo que informará su decisión a las partes procesales el jueves 4 de abril de 2024.

SIN TITULAR EN ECUADOR

La Vicepresidencia de Ecuador no tiene un titular en su sede en Quito, ya que Abad fue encomendada como embajadora del país en Israel poco después de que ella y el presidente Noboa asumieran el poder el pasado 23 de noviembre, tras ganar las elecciones generales extraordinarias.

Noboa y Abad habían experimentado un distanciamiento desde antes de llegar al poder y la decisión de enviarla a Tel Aviv supuso la confirmación de la ruptura política entre ambos.

En declaraciones a una radio de Costa Rica, Abad consideró el mes pasado que la presunta intención del Gobierno es quitarle del medio para que no asuma la Presidencia en caso de que Noboa decida postular a la reelección.

Sobre las declaraciones, el secretario de Comunicación de la Presidencia, Roberto Izurieta, señaló el martes que "ningún embajador puede hacer declaraciones en contra del Gobierno (...) y será el Ministerio de Relaciones Exteriores el que tome las medidas pertinentes" en el caso.

A una consulta en la televisión Teleamazonas sobre si Noboa está molesto con las declaraciones de Abad, Izurieta anotó: "Lo que él (Noboa) siente es lo que siente por cualquier funcionario público que no cumple su deber". 

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