Las casas andinas se construyen de acuerdo a su cosmovision
En Jatun Yachay Wasi se imparte la arquitectura milenaria como materia curricular. Ancestralmente se sabía qué materiales usar de acuerdo al clima.
La construcción andina está ligada con la cosmovisión de los pueblos milenarios, quienes plasmaron su sabiduría en la Chakana, una cruz cuadrada, en escalera y con doce puntas, que propugna el bienestar del ser humano en armonía con la naturaleza. Por eso, haber introducido construcciones consideradas modernas en los páramos ha influenciado en el recrudecimiento de dolencias como la artritis, consideran estudiosos en el tema.
En el Kay Pacha, el plano que representa el presente y todo lo que lo rodea, se genera el Sumak Kawsay (Buen Vivir) y la forma de construir las viviendas no puede estar alejada de esta cosmovisión.
Así explica Diego Guaraca, estudiante de Arquitectura Andina en la Jatun Yachay Wasi (Casa del gran Conocimiento) instituto que imparte esta sabiduría ancestral, como carrera a nivel superior en el cantón Colta en Chimborazo.
La vivienda para los pueblos originarios representaba no solo el lugar donde guarecerse, sino dónde desarrollaba sus actividades en completa armonía con la Pachamama (Madre Tierra) para lograr el bienestar de todos sus habitantes.
Este aprendizaje se puede plasmar en proyectos arquitectónicos que utilicen estrategias bioclimáticas y recuperen los saberes que se pierden bajo la creencia que todo lo moderno es mejor.
Con esto coincide el Tayta Yuru Parayaku, profesor de la institución. “La tecnología que se manejaba desde hace miles de años era antisísmica, pero lo más importante, mantenía saludables a las personas; por ejemplo, se sabía qué material usar para mantener las temperaturas”, indica.
Para ilustrar, describe una vivienda de la zona andina en los páramos. “En las montañas el suelo era de tierra, que dentro permanecía abrigada por la paja y el fogón, aunque afuera el frío fuera intenso. En la actualidad, construyen casas de hormigón a 4.200 m de altura, creyendo que es un adelanto para las comunidades; eso es un congelador, la gente que la habita vive enferma de artritis, reumatismo o varias enfermedades respiratorias, ahí la importancia que tenían las construcciones andinas”, recalca con vehemencia.
Cristóbal Freire, estudiante de cuarto semestre, explica que los ancestros tomaban en cuenta los cuatro elementos de los que el mundo andino considera que está formado el ser humano, y construían con materiales presentes en la zona, como el tapial, el bahareque, la paja, las piedras de canteras, las fibras extraídas de caña guadua, chonta y la quilla. “Toda construcción tenía de base una chakana en la cual estaba representada la conexión entre el Taita Inti (sol) y la Quilla (luna), y los cuatro elementos: aire, fuego, agua y tierra, pues la sabiduría andina dice que si se rompe la armonía de uno de estos, aparecerán las enfermedades.
