Carlos de la Torre: “La concesion del dinero electronico no fue gratuita”

El modelo toma forma. El gobierno define su camino y se abre al sector privado. El ministro Carlos de la Torre conversó con EXPRESO sobre esa ruta.

- ¿Qué podrá hacer con la proforma presupuestaria de 2017?

- La verdad, no mucho. Hemos hecho los mayores esfuerzos para corregir las cifras fiscales. La amortización y servicio de deuda pesó bastante en 2017 porque hubo vencimientos importantes. Esa situación no nos deja margen.

- La proforma contempla un endeudamiento de 11.000 millones de dólares. Se han obtenido 9.000 millones. ¿De dónde saldrá el resto?

- Básicamente de operaciones en las que ya estamos trabajando con multilaterales regionales. Hay también créditos ya gestionados que deben desembolsarse.

- ¿Con quién se contrató la deuda pendiente? ¿Con China?

- No se avizoran nuevos créditos con bancos chinos. Lo que se espera es que concluyan procesos del gobierno anterior. Es deuda contratada, pero no se tienen los desembolsos.

- ¿De cuánto es esa deuda?

- Son varios montos. Tengo uno muy claro por 150 millones de dólares con empresas petroleras, pero hay más.

- ¿Emitirán bonos?

- No lo hemos previsto, pero no lo hemos descartado.

- Según el Banco Central, el gasto corriente caerá en 500 millones hasta 2020. ¿Cómo lograr esa reducción?

- El consumo es la compra de bienes y servicios. Sí, se evidencia ese nivel de reducción porque no se comprarán bienes. No se comprarán vehículos ni se renovarán los equipos informáticos.

- Los estimados de inversión privada se centran en construcción y minería. ¿Cómo aumentar su participación?

- Hubo temas legales que frenaron la concesión de minería. Pero se están resolviendo y los recursos empezarán a llegar. En la construcción hubo una caída importante, desde 2014. Uno de los motivos fue la Ley de Plusvalía. En este momento ya se está trabajando en las modificaciones correspondientes para que las expectativas negativas desaparezcan.

- ¿La proforma de 2018 será mayor a la de este año?

- No podemos poner esos límites. Hay que entender que, en términos estructurales, los presupuestos van creciendo en el tiempo. Donde podemos hacer ajustes es en el déficit.

- ¿De cuánto será la reducción?

- En 2017, en el déficit del gobierno central logramos reducir en 1.000 millones. Para el próximo año esperamos una caída similar.

- ¿Cómo llegar a un déficit de 3.500 millones de dólares?

- En años anteriores, los gastos de inversión fueron altos. Eso ya no se hace y genera un alivio fiscal. Además, queremos una normativa adecuada para las alianzas público-privadas. En nuevos proyectos hidroeléctricos, por ejemplo, se buscará capital privado con una concesión. En el mantenimiento de la red vial también se quiere concesionar.

- ¿El ejemplo de la alianza con el sector privado es el manejo del dinero electrónico?

- Hay que controlar la demanda excesiva del dinero físico. En el Banco Central no hubo el desarrollo que queríamos.

- ¿Cuáles serán las tarifas?

- Iguales o similares a las que maneja el Central. Además, no es una concesión gratuita. Los operadores, especialmente los bancos privados, van a tener que cumplir ciertas metas de reducción del uso del efectivo. Caso contrario, cargarán con los costos de importación de billetes.

- ¿Eso fue parte del acuerdo?

- Claro que sí.

- ¿Cuáles son esas metas?

- No es inalcanzable. Hay un bien mayor que es el fortalecimiento de la dolarización.

- ¿Hay cifras concretas?

- Eso es difícil porque la dinámica de otros mecanismos de pago muestra que se requieren años para su desarrollo.

- ¿A dónde irán las cuentas abiertas del Central?

- No será una imposición. Cada usuario decidirá en qué entidad desea su cuenta.