Ecuador está atado de pies y manos en las preventas de petróleo que firmó el gobierno del expresidente Rafael Correa. Los intentos por liberarse de esos compromisos resultaron inútiles pese a que, en un punto determinado, se contaba con los recursos para pagar las deudas contratadas. En 2017, al menos cuatro empresas internacionales ofrecieron fondos para que el país termine definitivamente los compromisos asiáticos.

EXPRESO accedió a las cartas y presentaciones oficiales que ofrecían cerca de 3.000 millones de dólares como crédito para que el país pague sus compromisos, especialmente, con China. La ventaja era que, en la mayoría de casos, no se exigía crudo como garantía y la tasa de interés era mucho menor a la planteada por las petroleras del gigante asiático.

Glencore, Goldman Sachs, First Fideliter Holdings y Mitsubishi UFJ plantearon propuestas a la empresa estatal Petroecuador para concretar la operación de recompra de deuda. Las cartas llegaron a finales de 2017 y estaban dirigidas al entonces gerente de la estatal, Carlos Tejada.

First Fideliter Holdings propuso, por ejemplo, prestar 680 millones de dólares al Ecuador para que se recompre la deuda china. El plazo de pago era de cinco años con una tasa de interés del 4,5 %. Esa cifra representa un beneficio porque los créditos chinos, además de crudo, tienen tasas que superan el 8 % anual.

First exigía como garantía, la firma de una especie de pagaré por 1.000 millones de dólares.

La documentación obtenida muestra, además, que Goldman Sachs ofrecía un acuerdo similar al de preventas, pero con fórmulas y condiciones más equitativas. Su propuesta era de unos 750 millones de dólares para el país por petróleo anticipado.

Pese a los ofrecimientos, y al interés de las autoridades de Petroecuador por liquidar los créditos atados a crudo, ninguna alternativa fue considerada ni hubo luz verde. ¿La razón? Los contratos de venta anticipada que se firmaron durante el gobierno anterior tienen cláusulas que complicarían al país si se busca una salida temprana.

Lo más grave, explicó el gerente general de Petroecuador, Pablo Flores, es que aún precancelando las deudas, el país no estaría libre de entregar cargamentos de crudo. Los contratos especifican que si se pagan los créditos, los barriles de crudo aún deben entregarse hasta 2024.

No es el único obstáculo. Flores reconoce que terminar unilateralmente los contratos provocaría un arbitraje internacional donde Ecuador tiene pocas posibilidades de ganar. Los contratos pueden ser perjudiciales para las finanzas públicas, pero fueron firmados y aceptados por las autoridades afines al expresidente Correa.

El gerente considera que, aunque tentadoras, las ofertas no podían ser aceptadas. El único camino que queda es el de renegociar algunas condiciones con Petrochina, Unipec y Petrotailandia para poder liberar crudo y venderlo en el mercado spot. Para este año, por ejemplo, se está negociando una nueva readecuación de las entregas pactadas con Petrotailandia.

PETROCHINA.

Es la empresa con la que más contratos se firmó. También fue la más difícil a la hora de renegociar acuerdos en 2017. EXPRESOpublicó que incluso intentó liberarse de las sanciones que podía establecer la Contraloría.

UNIPEC.

La empresa china es la que menos contratos firmó con el Ecuador, durante el gobierno del expresidente Rafael Correa. Unipec suscribió contratos de venta anticipada de crudo, pero también acuerdos de crédito con petróleo comprometido.

ACTIVOS.

La estatal petrolera Petroecuador inició, este año, la valoración de sus principales activos. En marzo está prevista la adjudicación de los contratos para valorar terrenos, refinerías y estaciones de servicio.