Estaba en medio del océano. Hace 27 años no había celular y, a través de la señal intermitente de la radio del Buque Escuela Guayas, Mac Mera Cárdenas se enteró de que su primer hijo había nacido.

El capitán de navío llevaba cinco meses a bordo de la embarcación de la Armada del Ecuador y le faltaba uno para llegar a tierra y poder acurrucar en sus brazos a Max, su primogénito.

Todas las noches pensaba en su esposa y en el recién nacido, “pero son algunos sacrificios propios de la Marina”, recordó orgulloso. Su hijo, que ahora lo sobrepasa en estatura, estuvo junto a él la mañana de ayer, mientras recibía el Gran Collar de Honor al Mérito Militar.

Este reconocimiento lo otorgó la Armada del Ecuador a ocho oficiales, entre ellos, Mera, durante la ceremonia por los 187 años de creación de la institución, que se celebró desde las 10:00 en el Complejo Cívico Naval Jambelí, ubicado en el sur de la ciudad.

▶Leer: Dos días para descubrir los secretos de la Armada

Los capitanes Mac Mera, Luis Eduardo Kon, Eduardo Martínez, Luis Felipe Velásquez, Carlos Javier Nivela, Diego Ricardo Garzón, Juan Guillermo Guerrero y Octavio Quintero fueron los homenajeados. Adicional a ellos, los dos tripulantes Wilson David Sanaguano y José Elías Valarezo también recibieron el Collar de Honor al Mérito Militar, así mismo, por cumplir 38 años al servicio de la Armada.

“Más que un honor, es una motivación para poder continuar con este trabajo, en beneficio de la institución y de la Patria. Yo empecé desde los 17 años, es prácticamente toda la vida la que hemos estado aquí”, dijo Mera, quien al final de la ceremonia se fotografió orgulloso con sus compañeros y su familia.

La ceremonia estuvo presidida por Darwin Jarrín Cisneros, comandante general de la Armada. Además, durante el evento hubo un desfile de las Escuelas de Formación.

Desfilaron la Escuela Superior Naval Rafael Morán Valverde, con su Pelotón Comando (compuesto por la banda y el cachiporrero), Pelotón de Banderines y Pelotón de Fusileros.

También desfiló la Escuela de Grumetes Contramaestre Juan Suárez y la Escuela de Infantería de Marina Napoleón Cabezas Montalvo, cada uno con sus respectivos pelotones.

“Esta fecha que nos conmueve y le agradecemos a la institución por este reconocimiento”, dijo conmovido Diego Garzón, quien miraba la precisión con la que marchaban sus compañeros para cerrar la ceremonia.