El agua, más que una fuente de belleza

El agua, mas que una fuente de belleza

No se trata solo de lo bien que luce la piel cuando hay suficiente hidratación, sino de lo que ocurre con nuestro cuerpo cuando bebemos los dos litros de agua que tanto se empeñan los médicos en aconsejarnos, una cuota diaria a la que muchos no llegan.

Y hoy, en el Día del Agua, EXPRESO les muestra cuáles son los mejores momentos para tomarla y algunos tips para no desperdiciar esta fuente primordial para la vida. Y, lo más importante, le hace una lista de qué partes de nuestro organismo se ven afectadas por no dotarlo del suficiente líquido. Es posible que esa mala costumbre le esté causando efectos.

el estreñimiento.

1.Cuando su digestión se complica, revise primero sus hábitos: ¿toma agua?, ¿hace ejercicios?, ¿consume fibra? Recuerde que el agua favorece las evacuaciones gracias a su acción humectante. No la reemplazan los refrescos, los jugos o las bebidas energéticas, que, al contrario, pueden afectar la movilidad intestinal.

la infección urinaria.

2.La deshidratación hace que estemos más expuestos a infecciones a las vías urinarias como la cistitis. Es un mal fácil de detectar por el color amarillo intenso de la orina y por su olor fuerte. Esto se produce al haber una pérdida excesiva de las sales minerales.

la Migraña.

3.Los dolores de cabeza son también una señal. Incluso las migrañas pueden tener su origen en la falta de agua que no llega al cerebro y al área de los ojos. En algunas personas se manifiesta además con una ligera y temporal pérdida de la visión.

la mala circulación.

4.Nuestro torrente sanguíneo necesita de agua para eliminar las toxinas y así facilitar la circulación. Incluso influye en la presión arterial y hasta en los niveles de colesterol. Al no botar las toxinas, las grasas malas siguen circulando por nuestro organismo.

la artritis.

5.Aunque no lo crea, la artritis es una señal de falta de agua en las articulaciones. Ocurre lo mismo con los dolores de espalda. Si esta es la causa, los dolores se calmarán al comenzar a ingerir entre litro y medio y dos litros al día.

el estrés.

6.Cuando el cuerpo está deshidratado pone en marcha unos procesos fisiológicos que son similares a los que se activan cuando está pasando por una situación de estrés. Entonces la persona comienza a enfrentar cuadros de ansiedad y desesperación que alteran su ritmo habitual de trabajo.

el sobrepeso.

7.Ese mal hábito de no tomar agua también influye en su peso. Hay muchas ocasiones en que las personas confunden la sensación de sed con la de hambre y empiezan a comer desesperadamente. Y además, como lo mencionamos, al no tomar suficiente líquido, no eliminamos las toxinas.

las alergias.

8.Cuando no tenemos la suficiente cantidad de agua, el cuerpo aumenta la producción de histamina, que es la que regula la contracción muscular bronquial. Afecta no solo a quienes padecen de alergia sino también a los asmáticos.

los eczemas.

9.Para poder sudar, hay que tener qué botar y cuando tenemos resequedad esto se puede manifestar, por ejemplo, en una piel que comienza a pelarse en el área de los dedos de las manos.

baja la líbido.

10Como lo lee. Si lo anterior no le convence para comenzar a hidratarse como es debido, puede ser que esto lo haga. Una investigación hecha por el Observatorio de Hidratación y Salud de España señala que no solo el rendimiento intelectual y neuronal se afectan por el poco consumo de agua, sino que también se alteran negativamente el deseo y el placer sexual.