En los albores de la República comenzaron a tener vida jurídica numerosas poblaciones que habían venido formándose desde tiempos anteriores a la Colonia, inclusive en ignotos tiempos preincaicos. Uno de esos pueblos fue (San Rafael de Cumbibamba) Santiago de Bolívar, que fue lugar de descanso como tambo para los viajeros que, atravesando los Andes, se dirigían a la Costa y viceversa, pasando por el temido Puyal. Fue refundado por los españoles el 15 de agosto de 1534.

Llega un momento en la vida de los pueblos en que su desarrollo físico, geopolítico, cultural, social y sobre todo intelectual, hace que sus hijos visionarios de un futuro mejor, comiencen a pensar en la superioridad de sus actuaciones y que ha llegado el momento de valerse por sí mismos, gracias a su trabajo inteligente, esforzado y constante, iniciándose en Santiago las inquietudes por ser una parroquia independiente de San Lorenzo. Es así como patriotas de la talla de José María, Cosme y Santiago Lucio, Juan María Erazo, Francisco Núñez, Isidora Infante, Basilio Silva y su hija Teresa Silva Páez, fueron los principales promotores y cabecillas de los anhelos bien fundados de formar una parroquia altiva y soberana, que por sí misma, a través de sus hijos de sabia jerarquía y de sobrada intelectualidad, pudiera gobernarse sola y desarrollarse en todo sentido, logrando su Parroquialización el 24 de octubre de 1837.

Ing. Marco A. Arguello Ruiz