Los productores e industriales de arroz se han organizado mediante un clúster para retomar las exportaciones y mejorar la producción. Y ya ‘cosechan’ su primer logro: entre mayo y junio de este año volverán a venderle a Colombia, pues planifican ofertar entre 40.000 y 50.000 toneladas, contó a Diario EXPRESO José Luis García, vocero del Comité de Defensa del Agricultor.

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Para esto ya están tramitando los debidos permisos con Ecuador y con Colombia, explicó el ingeniero Jorge Suárez, vicepresidente del Frente de Organizaciones Agrícolas de Santa Lucía y Palestina.

Pero la meta a largo plazo es exportar el arroz ecuatoriano a Centroamérica y a Europa. En este último destino existen nichos para granos con valor agregado, puntualizó el ingeniero Juan Pablo Zúñiga, presidente de la Corporación de Industriales Arroceros de Ecuador (Corpcom) y vocero del Clúster de Arroz.

No obstante, para que el plan sea sostenible, es necesario apuntar a mejorar los niveles de productividad. Para ello hay que conseguir que las fincas apliquen las Buenas Prácticas Agrícolas, para lo cual se requiere de capacitación. “Es por ello que ya empezó la Escuela de la Semilla. Las clases las da el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (Iniap). Serán 60 horas de capacitación para aprender a seleccionar una semilla de calidad”, anunció García.

Zúñiga explicó que en el país actualmente se producen 5,5 toneladas en promedio de arroz por hectárea, siendo el primer reto en este punto subir la producción a 7 toneladas por hectárea. Con ello, sin necesidad de incrementar las áreas de siembra, la oferta aumentaría a 1’960.000 toneladas de arroz en cáscara, con lo cual se producirían 1’078.000 toneladas de arroz pilado, generando un excedente de unas 300.000 toneladas de arroz pilado.

Eso, a través de una gestión de apertura de nuevos mercados externos, generaría divisas adicionales al país por concepto de exportación de arroz por 240 millones de dólares, aproximadamente. “Divisas que no solo beneficiarían a los actores de la cadena arrocera, sino también a la economía del Ecuador. El plan es a mediano y largo plazo. Estimamos que se podrá alcanzar la producción de 7 toneladas por hectárea en dos o tres años, pero para esto tenemos que trabajar de manera articulada entre todos los actores de la cadena de producción y venta de arroz”, indicó Zúñiga.

En la actualidad el excedente de arroz es de 100.000 toneladas, que si se exportan van a generar unos 80 millones de dólares, estimó Zúñiga.

Hay optimismo entre los productores de arroz, porque dejaron de exportar en el 2023 cuando por el clima se afectó el cultivo, y más bien fue Ecuador el que importó el grano. La última vez que se vendió a Colombia fue en el 2022. Por ejemplo, entre abril y junio de ese año se facilitó al vecino país un total de 104.000 toneladas de arroz, según el Ministerio de Agricultura.

Dentro de este plan también se requiere tecnología. Por eso Suárez destacó las cinco niveladoras para terreno que emplean láser, con las que los ha apoyado la Prefectura del Guayas. Sin embargo, García advirtió que falta más. Por esto piden al Gobierno que elimine el Impuesto al Consumo Especial (ICE) y dé incentivos para adquirir los drones que usan para poner abono o fumigar, “porque en la actualidad esta herramienta cuesta unos 15.000 dólares y necesitamos que el precio baje a la mitad para ganar competitividad”.

El Clúster de Arroz está conformado por la Corpcom, la Corporación Nacional de Organizaciones de Productores Arroceros y la compañía Intiagro-Corporación Andina de Negocios.

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