Cartas de lectores

Derecho a la vivienda

La crisis de habitabilidad desnuda todas las falencias de un modelo que no es consecuente con el ser humano y la naturaleza

No es la falta de vivienda, sino la pobreza en que están sumidas las regiones menos favorecidas a nivel mundial, en que la sociedad vive oprimida por un sistema que consume nuestros bien más preciado, que es la tierra.

El alto índice de déficit habitacional no solo es de carácter cuantitativo sino cualitativo. Aún no se resuelve la demanda insatisfecha de la población en condiciones de pauperización, marginalidad, precarización y el hacinamiento espacial de la vivienda. Este fenómeno es consustancial al sistema capitalista, en que la lógica intrínseca del mercantilismo seguirá siendo la ganancia y la mayor rentabilidad de la inversión.

Se requiere cambiar el enfoque desde lo humano, no mirar desde la cantidad y rentabilidad, sino de la calidad que debe brindar una vivienda social con servicios dignos para un desarrollo humano integral.

La realidad rural también es amenazada por un sistema que consume todo los recursos que ve en el paso; la falta de políticas conlleva a una situación forzada, causando migraciones a las ciudades con mejor perspectiva económica, originando la marginalidad o los cinturones de miseria. La crisis de habitabilidad desnuda todas las falencias de un modelo que no es consecuente con el ser humano y la naturaleza, generando una crisis social y ambiental sin precedentes.

Vicente Mera Molina