Ocio

Godzilla vs. Kong
Godzilla y Kong, dos de las fuerzas más poderosas de un planeta habitado por aterradoras criaturas, se enfrentan en un espectacular combate que sacude los cimientos de la humanidad.Cortesía

Godzilla vs. Kong: Mucha forma, poco fondo

"Como fanático del género y como aquel que esperó mucho tiempo este encuentro me duele escribir esto...". Malas noticias en esta reseña de Gabriel Helguero

Siempre me han fascinado los kaiju (bestias gigantes) en todas sus facetas. Habiendo nacido al iniciar la década de los 80s, mi primera aproximación al género fue con la infame King Kong Lives (1986) que un canal de TV local rebobinaba hasta el hartazgo. Pero me gustaba, a mis escasos 5 años me parecía fascinante la proyección e inmensidad que Kong representaba. Era una mezcla de miedo y atracción. Muchos años después Peter Jackson (The Lord of the Rings) anunció su versión de la historia del gorila gigante y, luego de aquella, el nombre de Kong quedó en suspenso por más de una década cuando Warner, muy por debajo de la mesa, empezó a crear su MonsterVerse y nos entregó a reglón seguido Godzilla (2014) y Kong: Skull Island (2017).

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Y aunque ninguna de las dos últimas fueron películas sobresalientes, se notaba una coherencia visual y temática que entusiasmaba a los amantes del género. Más aún con la alucinante escena final de Kong: Skull Island que nos presentaba, en un abreboca, a los kaiju más sobresalientes y culminaba con el estruendoso grito de Godzilla. Estaba consumado, en algún momento veríamos enfrentarse a las bestias más reconocidas de todos los tiempos, el reptil y el primate se verían las caras y empezábamos a frotarnos las manos ya que lo que habíamos visto nos invitaba a soñar en grande.

¿Quién, fanático del género, no había suspirado alguna vez por ver este encuentro en la gran pantalla? Yo, uno de ellos, hoy que ha llegado el momento esperado debo agachar la cabeza con resignación… se ha perdido una gran oportunidad.

Godzilla vs. Kong llega después de Godzilla: King of Monsters (2019), en donde apreciamos el poderío del reptil gigante para vencer a otros, igual de amenazantes que él. En esta ocasión Godzilla se presentó como un aliado. Sin embargo, “algo” lo ha llevado a atacar nuevamente ciudades. Por eso, un grupo de investigadores, contratistas privados y el ejército, deciden buscar a Kong que se encuentra recluido en su isla para usarlo como guía hacia una expedición en el centro de la tierra que los llevaría a encontrar una solución para vencer a Godzilla. Esta trama, sencilla como se lee, condensa toda la película. Es difícil pensar que se pudiera errar ante un “examen” tan sencillo, pero a veces, lo más sencillo puede presentarse difícil de cumplir.

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¿Por dónde empezar? ¿Por lo inútil de las tramas de los protagonistas humanos? ¿O quizá por sus pésimas actuaciones? ¿O tal vez por la extrema humanización absurda e innecesaria de Kong? ¿O será acaso por el escaso contrapeso en el desarrollo de la trama para ambos monstruos? Godzilla vs Kong es un despropósito (casi) total, minuto a minuto es un desbarajuste palomitero que condena al espectador a consumir un producto aburrido en aras de ver la pelea del siglo. Y quizá esto último sea lo único atractivo de la cinta: las escenas en las que ambos titanes se encuentran para despedazarse en cruentos rounds que nos hacen contener el aliento. Pero ¿es suficiente?

Lo sé, hay quien puede pensar que uno no puede (ni debe) esperar grandes argumentos ni profundas historias en el género. Pero difiero, porque sí que hay películas sci fi donde el argumento, en la misma ideología y ficción, se presenta coherente, digerible, congruente y estremecedor. Las comparaciones pueden resultar incómodas pero un gran ejemplo de esto último es Pacific Rim (Guillermo del Toro) cuya temática es muy similar a lo presentado en el MonsterVerse. En Godzilla vs. Kong siento que se ha exagerado en el “absurdo” de la ficción y al verla sentí la enorme tentación de adelantar las escenas en las que no salían ninguno de los titanes porque no tenían sustento ni lógica. Es una película que se presenta en detrimento de lo construido con sus precuelas y es un paso hacia atrás en la edificación de este universo.

Como fanático del género y como aquel que esperó mucho tiempo este encuentro me duele escribir esto. No es necesario atropellar estas franquicias con tan malos productos, no se debe subestimar al espectador. Se ha perdido una gran oportunidad.