Tras las quejas de los usuarios, respecto al aumento de pago en las planillas de luz durante el confinamiento, la Corporación Nacional de Electricidad CNEL dispuso que se realicen nuevas tomas de lectura en los medidores para realizar, de proceder, una refacturación.

Las quejas, que han sido múltiples entre marzo y mayo, no han sido sin embargo nuevas. Desde inicios del 2019 como lo publicó este Diario, el problema se ha repetido al menos tres veces. La primera vez, la empresa eléctrica respondió que existían fallas en la lectura de los medidores, hecho que desembocó en el corte de contrato de CNEL con la empresa que hacía las lecturas en ese entonces, Sercoel. Esta vez, las molestias se dieron debido a que, por la crisis sanitaria generada por el coronavirus, la empresa suspendió las actividades de campo de toma de lectura, por lo que, conforme a lo dispuesto por el ente regulador, Arconel, se realizó una estimación de consumos.

“Es decir, que para la facturación de los valores se consideró el promedio de los últimos meses, valores que serán ajustados automáticamente cuando se tenga la lectura real”, aseguró CNEL meses atrás a este Diario.

Ante ello, solo en Guayaquil 93 trabajadores de CNEL recorren los sectores de la ciudad donde se han presentado las quejas por parte de aproximadamente 32.000 clientes. Esta semana, el Batallón del Suburbio y otros del suroeste de la ciudad, constan en el recorrido.

Amelia Ortíz, quien habita en la sexta etapa de la Alborada, es una de las usuarias que ha hecho pública su molestia y está a esperas de que el personal de la institución la visite. "No pa´se en mi casa los dos meses de confinamiento, pasé en casa de mis padres, y aún así, lo que debo pagar es altísimo. No hubo consumo, las luces y electrodomésticos, salvo algunos, permanecieron desconectados. Y aún así, el valor es mayor al de enero o febrero", precisó.

El mismo problema se repite en el cantón General Villamil, Playas. Los usuarios aseguran que, pese a permanecer -de igual manera- sus casas, el valor a pagar les ha salido “extremadamente alto”.

“He pasado en Guayaquil dos meses, no he ido ni un solo día a la playa y tengo que pagar incluso más que cuando pasaba allí todos los fines de semana”, se queja al respecto el residente Marco Mero, quien hizo ya su reclamo en las oficinas de la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL-EP), en Guayaquil.

Según precisó la compañia, en ese cantón y todos en donde se presente el problema se hará el mismo procedimiendo -el de nuevas tomas de lectura- para solventar las inquietudes y reclamos.