Desde los inicios de la civilización, los seres humanos han sentido la necesidad de encontrar respuestas a los diferentes cuestionamientos de su existencia, elaborando para ello códigos de creencias que dan información ante un destino desconocido o la incertidumbre de la vida.

Estos códigos de creencias se han plasmado en diferentes instrumentos conocidos como oráculos, adaptados a cada región y cultura.

El oráculo es un método de adivinación, un medio para encontrar respuestas a las preguntas que se tienen, generalmente utilizado para saber sobre el futuro. Como ejemplos tenemos las runas vikingas, el I Ching chino, las caracolas afro-brasileras, el tarot francés, entre otros.

¿Qué es el tarot?

Es una baraja de naipes muy antigua que se utiliza para entender el presente y predecir el futuro. Las cartas del tarot son una representación simbólica y cada una se corresponde con un aspecto de nuestro propio ser interno. Las figuras fueron creadas de acuerdo con los patrones de la mente subconsciente, siendo un instrumento muy útil para sacar a la consciencia el conocimiento al que no se tiene acceso normalmente.

Más allá de la mente consciente, que es la que se utiliza habitualmente en el día a día, existe una parte con la que no se está familiarizado: la mente subconsciente. En esta zona, el tiempo y el espacio no tienen el mismo dominio que en el consciente. Según el psicólogo Carl Jung, “la mente subconsciente está en contacto con el inconsciente colectivo, que es el depósito de todos los conocimientos, sabidurías y experiencias de la humanidad”.

El tarot está compuesto de 78 cartas, de las cuales 22 son Arcanos Mayores (arquetipos universales) y 56 Arcanos Menores divididos en cuatro palos o elementos: las copas se asocian con las emociones, sentimientos, amor y el elemento agua; las espadas se relacionan con el intelecto, pensamiento, comunicación y el elemento aire; los bastos están asociados a la acción, decisión y autoafirmación y el elemento fuego; y los oros o pentáculos se vinculan con el elemento tierra, la naturaleza, la materia, lo económico.

El uso terapéutico

El tarot terapéutico permite descubrir el potencial del consultante. Es una guía que ayuda a disolver bloqueos y resolver problemas concentrándose en el presente, en el autoconocimiento y transformación para tomar decisiones desde una perspectiva de crecimiento.