Caracas. El diputado opositor Juan Requesens fue herido ayer durante una protesta en la Defensoría del Pueblo.

Trastocada sesion sobre la crisis venezolana en la OEA

El chavismo. Convocó para hoy a una marcha en apoyo al régimen en el Parlamento, la que coincidirá con la anunciada por la oposición.

La Organización de Estados Americanos (OEA) retomó ayer una sesión extraordinaria sobre la crisis en Venezuela, en una decisión insólita que dejó de hecho sin efecto la suspensión ordenada por la presidencia boliviana del Consejo Permanente.

Con la ausencia tanto del representante boliviano, Diego Pary, como del embajador de Haití -que ostenta la vicepresidencia- el embajador más antiguo, el hondureño Leonidas Rosa Bautista, se prestó para dirigir la reunión, aplicando el artículo 6 del reglamento.

“Doy por abierta esta sesión del Consejo Permanente”, declaró Rosa, tras confirmar la presencia de 20 países en la sala Simón Bolívar en la sede de la OEA, en Washington.

Una vez instaurada, los embajadores de Bolivia y Venezuela en la OEA interrumpieron la sesión por considerar que es “ilegal” y supone “un golpe de Estado”.

Pary, que ostenta la presidencia de turno del Consejo Permanente, lamentó que “un país amigo” (Honduras) asuma “de manera golpista” e “ilegal” la presidencia del Consejo” y dijo que “no acepta de ninguna manera” que esa facultad le sea “usurpada”.

El asesor jurídico de la OEA, Jean Michel Arrighi, explicó que la convocatoria se hizo conforme a la normativa y que, a pesar de la ausencia de Bolivia, existía el quórum necesario (al menos 12 estados) para iniciar la sesión.

El embajador boliviano, que preside el Consejo desde el sábado y durante los próximos tres meses, abandonó la sala visiblemente enojado después de su intervención.

Quien sí se quedó en la sala fue el embajador de Venezuela, Samuel Moncada, que consideró “una grosería” que la canciller de Argentina, Susana Malcorra, “esté hablando sobre Venezuela sin nuestro permiso” y consideró la sesión “un golpe de Estado”.

Malcorra, quien acudió ayer a la OEA como presidenta pro témpore del Mercosur, denunció la “ausencia de una real separación de poderes en Venezuela” y pidió al Gobierno de Nicolás Maduro que cumpla “el cronograma electoral” y “libere a los presos políticos”.

Malcorra remarcó que la preocupación de los países del Mercosur por la situación en Venezuela no es “en ningún sentido injerencista”.

Hasta el cierre de esta edición, la sesión no avanzaba porque continuaban las intervenciones de Venezuela.

El grupo de 20 países, al igual que el secretario general, Luis Almagro, habían solicitado la reunión, imprimiendo carácter de urgencia, ante la crisis generada por la decisión del máximo tribunal de Venezuela de atribuirse facultades legislativas y retirar la inmunidad a los parlamentarios, en fallos luego parcialmente anulados.