La salud desde la vision venezolana:
hacer mas hospitales con excelencia

Señor director:

Soy venezolana. Llegué a Guayaquil a ejercer mi oficio de peluquera, pero para ayudarme con los gastos tuve que cuidar por las noches a un adulto mayor con Alzheimer. Mas un día él se enfermó gravemente e ingresó al hospital Los Ceibos por una infección a nivel estomacal, en donde permaneció hospitalizado por 17 días.

Durante este tiempo, los expertos le realizaron todo tipo de exámenes y tratamientos. Pude constatar que las enfermeras eran excelentes y los doctores también. Su evolución fue favorable y actualmente ya está en su casa. Sano y salvo.

Mientras mi paciente se recuperaba, me tocó dormir en las noches dentro de la zona hospitalaria, junto a él. Pude descansar perfectamente, porque los sillones son muy cómodos. Cuando él presentaba algún dolor, había un botón para llamar al personal y la verdad que sí llegaban bien rápido; no me puedo quejar de la atención porque es excelente.

En comparación con mi país, esto es un hotel de lujo. La salud en Venezuela es precaria: no hay guantes, ni gasas, ni medicinas, por lo que los pacientes se mueren, ya que los médicos y enfermeras no tienen cómo trabajar. En cambio en este hospital tienen de todo, no hay que comprar nada. Está totalmente abastecido y eso me gustó mucho.

A pesar de que aún no tengo la nacionalidad ecuatoriana (está en trámite), mi deseo es que la salud se mantenga así y pienso que deberían hacer más hospitales como este.

Wendy Hernández Toro